Ferrari evolucionó el Portofino a través del Portofino M (con la “M” de modificado), un nuevo superdeportivo que se diferencia por contar con novedades para el exterior, el equipamiento y la mecánica.
En cuanto a la estética, el “spider GT 2+”, como lo llama la marca italiana, posee un sector frontal con cambios en la parrilla, el paragolpes, mientras que la zona trasera incluye nuevos paragolpes y difusor. A eso se suman las flamantes llantas de aleación.
En el habitáculo, el Portofino M tiene nuevos asientos con estructura de magnesio, pantalla táctil de 10,25 pulgadas, sistema que calienta el cuello y una pantalla táctil de 7” vinculada con la principal y destinada al pasajero.
Por su parte, el equipamiento contiene el selector de modos de conducción, el manettino de la marca, que está ubicado en el volante y ofrece cinco opciones: Wet, Comfort, Sport, Race (nueva) y ESC-off.
También tiene asistencias a la conducción como frenado de emergencia, control de crucero adaptativo, detector de ángulo ciego, cambio automático de luces, reconocimiento de señales de tránsito y visión envolvente.
Las novedades se extienden a la mecánica, ya que el motor naftero V8 con 3.855 c.c. y turbocompresor elevó 20 CV la potencia para ofrecer 620 caballos a 7.500 rpm junto con 760 Nm de torque. Además, posee un filtro de partículas y se combina con una nueva caja automática con doble embrague y ocho marchas, que reemplaza a la de siete cambios. La tracción es trasera.
En cuanto a las prestaciones, el nuevo Ferrari Portofino M acelera de 0 a 100 km/h en 3,45 segundos y de 0 a 200 km/h en 9,8 s, mientras que la velocidad máxima supera los 320 km/h.