Porsche presentó el Mission X, un modelo conceptual que es “reinterpretación de un hypercar”, anunció la marca alemana, que lo mostró en el marco de la inauguración de la exposición ‘75 años de autos deportivos Porsche’, realizada en el Museo Porsche de Stuttgart-Zuffenhausen.
Con ADN de automovilismo, entre sus características cuenta con una carrocería con unos 4,5 metros de longitud, 2 de ancho y menos de 1,20 m de altura, junto al color Rocket Metallic creado especialmente y piezas de tejido de carbono.
Las llantas delanteras tienen 20 pulgadas y las traseras 21” junto a aeroblades con formato de turbina y casi transparentes que tienen la misión de lograr una mejor refrigeración de los frenos. A eso se suma el nuevo escudo de Porsche.
El nuevo prototipo además tiene una cúpula de cristal con un exoesqueleto de plástico reforzado con fibra de carbono, mientras que las puertas con “estilo Le Mans” tienen una apertura hacia adelante y arriba.
En el interior se destaca la asimetría del diseño que brinda especial atención al conductor. Hay dos plazas con colores diferentes y asientos con estructuras de plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) y cinturones de seis puntos integrados al monocasco. Asimismo, posee volante abierto y con levas y cámaras a bordo que permiten grabar.
La marca anunció que, si el Mission X con motorización eléctrica llega a la producción en serie, tendrá el objetivo de ser el auto homologado para la calle más rápido en Nürburgring Nordschleife, una relación peso/potencia de alrededor de un caballo por kilogramo, una carga aerodinámica muy superior a los del 911 GT3 RS y una carga de la batería (colocada en el centro del auto, detrás de los asientos) aproximadamente el doble de rápida respecto al Taycan Turbo S gracias a su sistema de 900 voltios.
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