Volkswagen creó en Brasil el inédito Virtus Cabrio, un descapotable producido a partir de la base del sedán del segmento B. Lo hizo para recibir al presidente del país vecino, Lula da Silva, en su planta de producción ubicada en São Bernardo do Campo.
El vehículo es un “showcar” que se destaca por combinar diversas características del Virtus, incluyendo las de las versiones versiones Highline y Exclusive. La configuración exterior posee el llamativo color Azul Biscay junto a llantas de aleación oscurecidas y con 18 pulgadas.
El modelo conceptual además cuenta con la presencia de un interior con tapizados, panel de a bordo y apliques de puertas de color negro; llamativamente, mantuvo los cuatro accesos laterales del modelo de serie.
Por otro lado, el prototipo no cuenta con techo, refuerzos estructurales para brindar una buena rigidez, un piso alargado para sumar espacio entre los asientos delanteros y traseros; este último tiene un diseño exclusivo. A eso se suma un travesaño para que se sujeten los ocupantes traseros (parados).
El motor es el conocido 250 TSI, el naftero 1.4 turbo con 150 caballos y 250 Nm de torque unido a la caja automática de seis velocidades. Es el mismo conjunto que está presente en la nueva versión tope de gama Exclusive.
La unidad estará en la colección VW Garage, donde acompañará a otros modelos especiales. Además, es el quinto vehículo que realiza fabrica para estos eventos; se suma a los Beetle (1959), Polo Sedán (1993) y Fox (2003 y 2005), todos descapotables.
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