Con apenas 900 habitantes, “Uribe” se encuentra a sólo 16 kilómetros de Cañuelas, y a menos de una hora de la ciudad de Buenos Aires. Este pueblo se fundó en el año 1889, cuando Miguel Nemesio de Uribelarrea, quien era presidente de la municipalidad de Buenos Aires durante el gobierno de Sarmiento, donó las tierras para crear una Colonia Agrícola. Así fue como en los años 30 y 40 tuvo su época de máximo esplendor: contaba con más de un centenar de tambos y queserías que abastecían a la ciudad de Buenos Aires a través del ferrocarril “del Sur”.
Hoy, el principal atractivo es un caserío casi intacto desde el 1900, donde funcionan principalmente locales gastronómicos, un pueblo que sorprende por su antigüedad y su cercanía. Se destaca además, la plaza principal con forma octogonal y estilo francés que fue diseñada por el Arquitecto Pedro Benoit. La plaza “Centenaria” tiene una gran arboleda y cuatro diagonales que parten desde allí. Enfrente está la Iglesia Nuestra Señora de Luján, de estilo neo gótico, inaugurada en diciembre de 1890 y que sirvió de marco a la película “Evita”.
En el acceso al pueblo se encuentra la vieja estación ferroviaria, con su típico edificio de estilo inglés y sus bancos de plaza. Cruzando la calle están la parrilla Wimpi, el restaurante Leonardo, dónde se puede disfrutar de pastas y comidas al horno de barro y, para remontarse por completo al 1900, hay que visitar Macedonio. Este restaurante dónde se sirven tapas y picadas, se destaca por su mobiliario y decoración con viejos mostradores, un estaño, una balanza y estanterías que atesoran botellas centenarias. Todos estos locales funcionan sólo los fines de semana.
A unos 300 metros del límite del pueblo, siguiendo el ramal ferroviario en dirección a Lobos, hay un bellísimo túnel de árboles que se cierra sobre las vías.
En un recorrido a pie se pueden descubrir antiguas fachadas de casas familiares y edificios públicos que en otros tiempos fueron las bases de un importante desarrollo poblacional.
A tres kilómetros del centro urbano se encuentra la Escuela Agrotécnica Salesiana Don Bosco. Inaugurada el 28 de enero de 1894, fue la primera escuela agrícola de la Argentina. Es ideal para ir con los más chicos ya que se recorren el tambo, los corrales, la huerta y la fábrica de quesos y dulces. Aquí también funciona una proveeduría en la que se venden productos elaborados en el lugar: quesos, dulce de leche, huevos, miel, mermeladas, pickles, berenjenas en escabeche y yerba son algunos de 
los productos que se consiguen.
Otra opción para los chicos y los golosos es el Valle de Goñi, un establecimiento dedicado a la cría de cabras. Hay una casa de té con amplia variedad de tortas. Se puede visitar el tambo, alimentar a los cabritos y adquirir un exclusivo dulce de leche o helados producidos con leche caprina.
En uno de los galpones de la antigua estación ferroviaria funciona El Museo de Máquinas y Herramientas “Padre Leopoldo Rizzi”. Exhibe piezas vinculadas al desarrollo agropecuario de la región y otros elementos donados por los habitantes de la localidad.
Uribelarrea no solo es famoso por su producción lechera, sus calles sirvieron de escenario a más de una decena de secuencias de películas, cortos y publicidades. Films como “Juan Moreira” de Leonardo Favio, “Evita” dirigida por Alan Parker o la recientemente estrenada “Felicitas Guerrero” de Teresa Constantini se filmaron en estas calles.