Este nuevo N develado en Goodwood, como no podía ser de otro modo, aumenta la potencia por sólo 10” a una tropa de 650 y 770 Nm. Esto se debe a las conocidas intervenciones de la división N sobre los modelos de la marca y por primera vez con un vehículo eléctrico.
El Ioniq 5, que ofrecía hasta 306 caballos (LINK), alcanza estos números gracias a sus dos motores que le aportan utilizando el modo Grin Boost 238 CV desde el eje delantero y 412 el trasero.
Así y todo la potencia total nada despreciable del modelo, que se puede ajustar en once niveles, es de 609 CV y 740 Nm, le permite alcanzar una velocidad máxima de 258 km/h; además ambos motores aportan tracción integral al modelo y su diferencial (trasero) es controlado electrónicamente.
Aunque no tiene escapes, hay un sistema de sonido denominado N active sound que, gracias a 10 parlantes ubicados dentro y fuera del vehículo con tres opciones: Ignition que simula el ruido de un 2.0 naftero, Evolution que emula el sonido del concept eléctrico RN22e o Supersonic que se escucha como dos turbinas de avión.
Además de la función que mencionamos anteriormente cuenta con otras tantas, a saber: el N Launch Control, una función de arranque rápido; N Pedal, una configuración deportiva del pedal del acelerador;
Un sistema de preclimatización de la batería con dos opciones,Drag, con la que se puede obtener la mayor potencia durante un periodo corto de tiempo, y la Track , que optimiza la baja temperatura para dar el mayor número de vueltas a un circuito;
Por último la función N Race elegible para manejar en circuitos con dos configuraciones de uso, Endurance (autonomía) y Sprint (potencia); N Drift Optimizer para los derrapes y N e-shift que simula una transmisión de ocho marchas.