Pocos automóviles en el mundo pueden mirar hacia atrás y contar con tan larga tradición y continuidad como el Porsche 911 que en sus cinco décadas de permanencia en el mercado supo posicionarse como el alma de la marca.
No sólo ha inspirado a los amantes de los autos deportivos de todo el mundo desde su debut como el modelo 901 en la Exposición Internacional del Automóvil (IAA) en septiembre de 1963, sino que hoy es considerado el deportivo por excelencia.
Este modelo del cual se han fabricado más de 820.000 unidades se presenta en el Salon del Automóvil de Buenos Aires, junto a un par de otra época (no se trata de una versión del 63, sino una del 73 -40 años de diferencia-) para conmemorar las cinco décadas de este modelo que se están celebrando alrededor del globo.
Cada una de sus siete generaciones fue reinventada por los ingenieros en Zuffenhausen y Weissach, y una y otra vez demostraron al mundo el poder de innovación de la marca Porsche. Y aquí en Buenos Aires se exhibe el modelo de 1973 junto al último 911, sin dudas el mejor 911 de todos los tiempos – hasta que llegue la próxima generación.
