Fueron poco más de tres años de ausencia, pero Luis Ureta Sáenz Peña retornó –luego de su paso por la función pública- a la conducción del grupo PSA Peugeot Citroën en medio de un nuevo desarrollo industrial en puerta.
En efecto, de cara a los próximos dos años, el grupo que custodia a las marcas Peugeot y Citroën renovará la oferta local y para encarar este proceso, no se contará con un desembolso total de fondos propios sino que se gestionó un plan del Bicentenario que finalmente fue aprobado el pasado 14 de julio por un monto de $150 millones.
“Es la primera vez que nos endeudamos a nivel local y es un plan que además del desarrollo de nuevos productos, va atado al desarrollo de proveedores locales”, indicó Ureta Sáenz Peña en la primera entrevista que concedió desde su retorno.
Ante la consulta de TiempoMotor.com sobre los detalles del nuevo plan de inversiones, Ureta Sáenz Peña señaló que “el plan es para el desarrollo de uno, dos o tres nuevos proyectos (modelos) porque es una visión a largo plazo”, indicó el directivo y destacó que este proceso además va en sintonía con el ritmo de inversiones de $300 millones por año que viene ejecutando el grupo.
“Además del modelo (modelos), estamos implementando nueva tecnología y apostando al desarrollo de proveedores”, destacó el directivo que regresó al país en diciembre pasado cuando dejó su cargo de Embajador argentino en Francia –cargo que asumió en 2007.
Si bien el hermetismo se hace presente en cada nuevo proyecto industrial y oficialmente nadie quiere dar indicios sobre cuál será la nueva criatura en salir de la línea, nos tomamos una licencia para explayarnos sobre las potencialidades (que muchas veces dejan el terreno de las fantasías para transitar sobre la vereda de las certezas). En este sentido, uno de los modelos a producir en El Palomar es el nuevo Peugeot 308 –sucesor del 307 (cazado últimamente en pruebas por la city y alrededores).
Pero dado que Sáenz Peña indicó que sería “uno o más proyectos”, se puede decir que es casi un hecho que a este lanzamiento le sucederá el de Citroën, siempre apostando al desarrollo de la plataforma M1, es decir, hay que esperar el nuevo C4 para más adelante.
A pesar de haber estado apartado unos tres años de la industria automotriz, el directivo conoce este ámbito a la perfección. Con más de cuatro décadas de carrera en el sector, Sáenz Peña ha ido ganando espacio y poder hasta convertirse en el presidente del Directorio de la filial local de PSA Peugeot Citroën, después ejercer funciones en Francia y España durante más de 15 años. Cargo que nuevamente retoma en este 2011 luego de su paso por la embajada Argentina en Francia.
Esa “ausencia” no se traduce hoy en una imposibilidad para hacer un análisis del sector. En este sentido, y en medio del repaso de anécdotas como Embajador, Sáenz Peña considera que “las proyecciones de alcanzar un millón de unidades en ventas se puede llegar en dos o tres años con una tendencia a estabilizarse. Pero siempre en los cálculos no hemos equivocado”, señaló el directivo haciendo referencia a las estimaciones de ventas que se dan año a año y en cada cierre, (al menos en los últimos cuatro años), las estimaciones se han visto superadas ampliamente por la realidad.
En este tren de análisis, para 2011 se estima que el mercado se ubicará en unas 800.000 unidades producidas y unas 700/750.000 en ventas. “En el caso de PSA, las ventas han superado el 45% de incremento y las producción creció un 30% respecto del primer semestre de 2010”, detalló Sáenz Peña.
Para todo 2011, la empresa espera conservar el primer puesto en producción (posición que resignó en 2010 frente a GM) ya que estima sacar de las líneas de El Palomar aproximadamente 160.000 unidades repartidas entre Peugeot y Citroën.
CRISIS Y OPORTUNIDAD
Para el directivo “el sector atraviesa una crisis pero de crecimiento” y es el momento para sentarse a negociar (y no seguir perdiendo tiempo de desarrollo y oportunidades).
En este contexto no se dejó de lado la nueva exigencia oficial de que las empresas compensen uno a uno sus balanzas comerciales. “De cada 10 autos que vendemos 7.5 son de El Palomar, por lo que no tuvimos problemas. El plan presentado está bien. La infraestructura local es competente para que se busque el equilibrio”, dijo.
Asimismo, agregó que sí hay que mirar la balanza de piezas y en este sentido, con el reciente trabajo de Afac que se publicó y en donde se muestra que el déficit comercial del sector autopartista aumentó un 51%, Sáenz Peña coincidió en que se está importando con un real alto y un euro alto. “El sector viene creciendo y con esto estamos notando que tenemos un atraso en el desarrollo local de 5 o seis años y en eso somos todos culpables. Si estamos importando de países más caros, el precio es una traba y en los dos extremos hay espacio. Se tiene que dar un plan y colaboración entre Gobierno, nosotros (terminales) y los autopartistas”, dijo.