LE MANS: EL LEON SACIO SU SED DE GLORIA

El español Marc Gene y Peugeot ganaron las 24 horas de Le Mans, rompiendo una racha de cinco triunfos consecutivos de Audi.

El Peugeot número 9 de motor diesel fue uno de los pocos vehículos en disfrutar un recorrido sin problemas en la carrera de resistencia más famosa del mundo.

Gene, el británico David Brabham y el austriaco Alexander Wurz completaron 382 vueltas en 24 horas, una más que el Peugeot número 8 conducido por el trío de franceses integrado por Sebastien Bourdais, Franck Montagny y Stephane Sarrazin.

LA PREVIA
Está todo listo para que este sábado arranque la carrera de duración más famosa del mundo, las 24 horas de LeMans. Y un año después del último circuito, el team Peugeot regresa con sed de gloria.

Y hoy logró saciarla en parte. Es que cuando quedaba poco menos de media hora para concluir la larga jornada de calificación de las 24 Horas de Le Mans de hoy, y tras poner neumáticos nuevos, el Peugeot 908 HDI N° 8 pilotado por Stephane Sarrazin consiguió un tiempo de 3:22.888 y superó al Audi Nº 1 que había estado dominando la mayor parte de la sesión por más de 7 décimas de segundo. Sarrazin conseguió así la pole position para el 908 que compartirá en la carrera con Sebastien Bourdais y Franck Montagny.

Con la experiencia del pasado (venía liderando y perdió la carrera en el último tramo, cuando comenzó a llover), el team del grupo galo hizo foco en el «traction control» que le había planteado problemas cuando empezó a llover. Además, con la ayuda de Michelin se hizo una adaptación de los neumáticos a las nuevas características del 908 HDi FAP. También se logró una mejora en el centrado de las ruedas para facilitar el trabajo de los mecánicos en los recambios de gomas.

Paralelamente a la experiencia recogida en todos los circuitos de la temporada, el equipo debió adaptarse al cambio reglamentario impuesto para esta temporada por el Automóvil Club del Oeste que apunta a reducir el rendimiento de los autos.

Bruno Famin, director técnico de Peugeot Sport, explicó los cinco ejes principales que rigen para pelear la punta este año. “Primero el ACO nos obligó a reducir la potencia del motor reduciendo las bridas para nuestro auto cerrado de 39,9mm a 38,3mm. Instalamos un sistema de aire acondicionado, pues la temperatura dentro del habitáculo no debe superar los 32°. Otro gran eje ha sido el aerodinámico, ya que hubo una reducción del alerón trasero impuesta por el nuevo reglamento. Así pasamos de 2mts a 1,60mts. Tendremos un nuevo perfil de capot que estrenamos aquí en Le Mans”

A raíz de estos cambios y para trabajar en la confiabilidad de todo el automóvil, el equipo de Peugeot Sport hizo una gran cantidad de pruebas en diferentes circuitos.

Olivier Quesnel, director de Peugeot Sport, explicó que los fundamentos del trabajo previo a esta mítica competencia se basaron “en buscar la máxima confiabilidad a través de múltiples sesiones de simulación de Endurance, pero evitando imponer al equipo un programa de carreras demasiado pesado, pues queríamos presentarnos en Le Mans con mecánicos y pilotos en su mejor aptitud física y mental.”

A fin de mayo, se organizaron en Chamonix tres días de preparación física y de cohesión con los pilotos, lo que permitió reforzar todavía más esta ósmosis entre las tres tripulaciones. Los mecánicos, por su parte, también tuvieron un curso de entrenamiento físico y durante toda la carrera de Le Mans serán atendidos por un osteópata.

Ahora las cartas están sobre la mesa. Habrá que aguardar lo que sucederá el domingo. Hoyel León ruge contento.