La marca del óvalo confirmó que tiene reservado para el próximo Salón del Automóvil de Ginebra un as bajo la manga: la versión definitiva y de producción del pequeño monovolumen B-Max, un flamante modelo que estrenará el motor de tres cilindros 1.0 Ecoboost.
El nuevo B-Max, que se comercializará en el mercado europeo hacia el último tramo de este veinte doce arrancó recientemente la producción a un año de su debut como "concept" en la edición 2011 del Salón de Ginebra.
El B-Max es un compacto funcional que aporta un atractivo diseño al segmento en línea con la evolución del Kinetic Design (el lenguaje de Ford) y nuevas tecnologías hasta ahora sólo disponibles en coches de segmentos superiores.
Este monovolumen, con puertas traseras con correderas y sin pilares centrales supone un enfoque nuevo en materia de accesibilidad, lo que se traduce en una gran facilidad de acceso para conductores, pasajeros y equipaje.
El B-MAX, según Ford, también contará con acabados y materiales de alta calidad que rara vez se pueden encontrar en un vehículo compacto popular o economico, junto con una flexible distribución de los asientos y un espacio de carga sin rival en su segmento.