¿HABRA FINALMENTE UN BMW M7?

Si tanto Kubica como Heidfeld se quedan sin trabajo en la escudería BMW de Fórmula 1, pueden anotarse como próximos choferes de lujo de algún millonario excéntrico que quiera gozar –desde el asiento trasero- de los más de 600 CV de la futura súper berlina de la marca con residencia en Munich. ¿O todo es imaginación?

Es extraño porque la expectativa en distintos blogs y páginas web de fanáticos es mucha y casi como que piden a gritos la aparición de un Serie 7 súper potenciado… pero lo cierto es que después, sólo un puñado de clientes muy selectos podrán tenerlo en su garage.

Como información oficial la marca no asegura ni niega nada, pero tampoco se preocupa en desmentir con énfasis, lo cierto es que diversas unidades de prueba -radicalmente distintas- fueron sorprendidas en fase de test. Por las apariencias, todo parece indicar que la berlina más cara de la marca bávara por primera vez tendrá la letra M pegada en la tapa del baúl. Las anteriores versiones siempre fueron desarrolladas de manera particular por Alpina, una marca dedicada por muchos años a potenciar y modificar vehículos BMW.

Poner la imaginación a andar y conjeturar un S7M no cuesta mucho: un frontal bastante parecido al utilizado en el M5, impresionantes llantas de aleación de, por lo menos, 20″ de diámetro con caucho de perfil extra bajo y las consabidas “branquias” laterales. Las unidades que se vieron incorporan vistosas tomas de aire en la zona inferior del paragolpes y presumiblemente un capot de aluminio para ganar algunos puntos en la carrera contra el peso.

Desde las dos ópticas desde donde pueden analizarse las probabilidades del debut comercial –básicamente por sí o por no- se encuentran argumentos convincentes: por un lado la crisis está replanteando la conveniencia de usar motores de gran cilindrada y potencia en busca de obtener rendimientos más racionales (hasta el mismísimo Obama se lo tomó en serio…), pero por el otro ni Mercedes Benz ni Audi tienen previsto discontinuar modelos tales como el S63/S65 AMG o el S8. Es más, si bien BMW ya contaba con el M6 en las ligas mayores, la aparición del mismísimo BMW X6 (y su variante M casi un exceso de lujo y potencia) puede considerarse un acierto comercial en virtud del suceso generado.

En la actualidad, el máximo exponente de la gama S7 es el motor es el V12 Twin Turbo de 5.972 cc de 544 CV y 750 Nm de par motor; superar esa marca no es cosa sencilla pero de concretarse el nuevo M se especula que montará bien un V12 de 6.0 litros de cilindrada, un V8 biturbo (similar al de la X6) o un derivado del 5 litros V10 del M5. Por uno u otro camino el objetivo es claro: que sea capaz de erogar 612 caballos (y de paso empardar a la casa de la estrella). ¿Te parecen suficientes? Habrá que esperar hasta 2010, tiempo de definiciones… o estar atento al stand blanco y azul en Frankfurt de este año.

Lo cierto es que BMW resigna desde hace años esa porción –pequeña pero representativa inequívoca de poder- de mercado y no son tiempos estos de dejar clientes insatisfechos, sobre todo si la competencia hace su agosto.