En el marco del Salón del Automóvil de Ginebra, las cartas que anticipan el futuro de la industria automotriz compartirán escena con algunas rarezas como esta de la empresa de Frank Rinderknecht.
Se trata de un auto 100% “verde” desde su estructura y algo así como reinterpretación SXXI del Méhari, aquel icónico modelo del doble chevrón que se fabricó entre 1968 y 1988 y supo posicionarse como un auto de bajo costo y tuvo fuerte impacto en aquellos que buscaban un vehículo recreacional y de trabajo pero con una mecánica sencilla.
Este booggie Bamboo de 1090 kg está equipado con un motor eléctrico que ofrece 54 kW (algo asi como unos 70 cv) que impulsa el eje delantero y le permite rendir 105 km y alcanzar una velocidad tope de 120 km/h.
El chasis de acero con amortiguadores horizontales lleva un cuerpo que se va armando, las llantas de 17 de AEZ se complementan con los neumáticos Goodyear EfficientGrip que permiten el ahorro de energía. Simpatico y bastante tecnologico el auto bamboo color salmón y toques pop.
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