MIENTRAS PREPARA EL SCENIC 3, RENAULT SE SUBE A LA MOVIDA “ECO”

La firma del rombo presentará una nueva alternativa en consonancia con los tiempos de crisis que se viven a nivel mundial con respecto al combustible. Se trata de una versión del Scénic ZEV H2: eléctrico y propulsado por hidrógeno, es decir, por su caño de escape sólo emana vapor de agua. 

Los ingredientes que componen este prototipo son una Grand Scenic elevada 60 mm, una pila recargable, un depósito de hidrógeno, un motor eléctrico y una batería de ión-litio. 

Esta ambiciosa receta le ha costado a Renault la suma de 3,5 millones de euros, monto que -así y todo- ha sido considerado como un logro; gracias a la fusión de tecnologías entre Nissan y Renault. 

A primera vista lo que llama la atención al conducir este Scénic, es que no se sabe si el motor está encendido o no, ya que éste no emite sonido alguno. 

A pesar de haber ganado 300 kilos con la incorporación de todos los elementos que hacen a su funcionamiento, la habitabilidad interior no se ve reducida en modo alguno, siendo de igual apariencia que otro auto, tanto exterior como interiormente. 

El problema que a primera impresión presenta este Scénic ZEV H2 es la batería, la cual es muy cara y cuya producción en serie es aún lejana en el tiempo. De no ser por ella, en Renault aseguran que podrían ponerlo en el mercado pequeñas producciones en un plazo muy breve de tiempo (posiblemente lo hagan en 2011). 

Por otra parte, Renault puso en práctica otra muestra de downsizing de motores de motores, al comenzar la fabricación de su TCe 130 en la planta española de Valladolid con miras a reducir cilindrada (16 válvulas y sólo 1.4 litros) pero manteniendo el comportamiento y las prestaciones de uno mayor (130 CV). 

Estas innovaciones técnicas aspiran a reducir de peso el motor en 6,5 kg tanto como el movimiento en espiral que imprime al combustible para que queme menos y de forma más limpia. 

MAS SCENIC, MAS PARIS. La renovación de productos en la casa de la Régie sigue avanzando, mientras en Internet se ven los bosquejos de la futura familia Mégane, los topos de TM encontraron las primeras imágenes (difusas, pero testimoniales) de lo que será la tercera generación del “fundador” de los monovolúmenes medianos.

Por lo que pudo saberse –y probablemente en simultáneo con los sedanes-, el prototipo será presentado oficialmente en el Salón de París con vistas a alcanzar la comercialización en el año venidero y contará con versiones de cinco y siete asientos, mejoras sustanciales en la capacidad interior y un habitáculo capaz de personalizarse en un grado muy superior. La plataforma elegida es un derivado respecto de la que usará el Mégane 2009.

La sorpresa principal será la incorporación de puertas traseras corredizas, aunque se especula que Renault llevará a cabo las mejoras técnicas necesarias para ocultar el mecanismo.

El Scénic será el último de la línea de los nuevo Mégane en arribar al mercado. El flamante diseño del frontal es parte de una estrategia para aumentar la apariencia emocional en los futuros vehículos Renault. Un ADN que ya se vio en el Laguna III y se extenderá a través del tiempo en toda la gama. Por lo que puede espiarse en las primeras tomas, sobresale una gran parrilla inferior para la refrigeración del motor, con ópticas delanteras altamente estilizadas. 

Siguiendo la tendencia ya recorrida por la generación que suplantará, habrá una versión Scénic (cinco pasajeros) y Grand Scénic (siete pasajeros), en las que las ópticas traseras serán diferentes para cada una de las versiones. En tanto, el tablero estaría ubicado en el centro, tal la solución que adopta Citroën.