EL TESORO PIDE A GM PREPARAR QUIEBRA PARA EL 1 DE JUNIO

El Departamento del Tesoro de EE.UU. comunicó a GM que comience con los preparativos necesarios para acogerse a la ley de quiebras el 1 de junio. Esa es la fecha límite para que la N°1 de EE.UU. inicie una profunda reestructuración que reduzca radicalmente su tamaño y sus obligaciones financieras con trabajadores y tenedores de bonos.

Si GM no puede terminar los preparativos antes de esa fecha, el fabricante tendrá que declararse en suspensión de pagos. Los integrantes del Grupo Presidencial del Automóvil (GPA), encargados por el presidente estadounidense de supervisar la reestructuración del sector, iniciarán en Detroit una nueva ronda de conversaciones sobre el futuro de la terminal.

Sobre la mesa están las acciones que la automotriz se verá obligada a tomar en las próximas semanas para intentar mantener la empresa con vida, especialmente la reducción de su deuda no asegurada (unos u$s28.000 millones) y las obligaciones financieras con sus trabajadores (otros u$s20.000 millones).

Sin embargo, la posibilidad de una quiebra controlada está más latente que nunca. Por su parte los inversores reaccionaron de forma negativa a las noticias del aumento de que General Motors tenga que echar mano de la suspensión de pagos.

Desde diciembre, Washington ha prestado a General Motors u$s13.400 millones para mantener sus operaciones en marcha. En este tren, analistas del mercado entienden que el hecho de que General Motors vaya a presentar esta semana una oferta a sus tenedores de bonos muy inferior a la realizada hace un mes, aumenta las probabilidades de que la empresa esté preparando la suspensión de pagos.

En marzo General Motors ofreció un 90% de sus acciones a los tenedores de bonos a cambio de eliminar su deuda. Ahora, redujo la oferta a sólo un 20% de sus acciones.

Desde que asumió la dirección de la empresa, Fritz Henderson señaló en varias ocasiones que General Motors se declarará en bancarrota antes del 1 de junio si considera que no puede llegar a acuerdos para la reestructuración del fabricante. El Departamento del Tesoro querría que la suspensión de pagos dure sólo dos semanas.

El plan que se está perfilando como el preferido por la Casa Blanca y General Motors es que el gobierno estadounidense proporcione entre u$s5.000 y 7.000 millones para la creación de una nueva General Motors formada con los activos rentables. Estos serían las marcas Chevrolet, Cadillac, Buick y GMC.