LUEGO DEL MEGA RECALL, TOYOTA SUSPENDE LA VENTA DE OCHO MODELOS

Si bien por estas tierras la noticia puede ser una más… en los Estados Unidos ha sido tal la repercusión que ha inundado miles de páginas y horas de televisión a lo largo y ancho del país del norte por lo que se decidió aplicar una medida preventiva mayor y de altísimo costo que el clásico recall.

Es que el grupo japonés Toyota, primer fabricante mundial de automóviles decidió suspender temporalmente la producción y la venta en los Estados Unidos de ocho modelos, que pueden presentar un defecto en el acelerador.

La compañía ya había comunicado el 21 de enero pasado el llamado a revisión de 2.300.000 vehículos en Estados Unidos, potencialmente afectados por este defecto, consistente en que el pedal del acelerador puede quedarse atascado o tardar demasiado tiempo en retornar a su posición original cuando deja de pisarse.

Previamente, Toyota había anunciado otra campaña de revisión de 4,2 millones de vehículos, en los que la mala colocación de la alfombra podía interferir el correcto funcionamiento del pedal del acelerador.

Con estas dos campañas, se estima que se ven afectados aproximadamente 1.700.000 vehículos. El vicepresidente y director general de Toyota en Norteamérica, Bob Carter, indicó que el objetivo de la empresa es garantizar la seguridad de sus clientes y recuperar la confianza.

"Esta acción (la suspensión de la producción y las ventas) es necesaria hasta que se aplique un remedio. Estamos haciendo todos los esfuerzos para dar una solución a los clientes lo antes posible", añadió.

Los modelos afectados que Toyota ha dejado de vender provisionalmente en Estados Unidos son el utilitario deportivo compacto RAV4, Corolla, Matrix, Avalon, Camry, Highlander, Tundra y Sequoia.

Además, la automotriz suspendió la producción en las plantas de Canadá, que fabrica los modelos Corolla, Matrix y RAV4, Indiana (Sequoia y Highlander), Kentucky (Camry y Avalon), Indiana (Camry) y Texas (Tundra). Ninguna otra fábrica de Estados Unidos está afectada por la decisión de interrumpir la producción.