DE PASILLO: SOBRE LLOVIDO, ADUANA BRASILEÑA A REGLAMENTO

Mientras las terminales e importadores que operan en la Argentina continúan esperando la plena liberación de las miles de unidades que aún están demoradas en el puerto de Zárate, y lidian con la aprobación de las Declaraciones Juradas, Licencias no Automáticas y homologaciones, se presentó un nuevo frente de tormenta del otro lado de la frontera.

A la menor demanda de unidades que viene registrando el sector por parte de Brasil y que repercutió en la producción de algunas plantas en Argentina, por estas horas y como consecuencia de un conflicto interno (o como devolución de gentileza, mencionan algunos) la Aduana en el país vecino se encuentra de paro (en rigor trabajo a reglamento), de acuerdo a las consultas realizadas a varios directivos locales del sector. Con este escenario, se agudiza aún más los (ya) demorados procesos de impo- expo que se dan aquí en el país tanto de vehículos como de piezas.

“No se están liberando los permisos en tiempo y forma”, señalaron fuentes del mercado. Con ello, estiman que los puertos -también del otro lado- registrarán una suerte de “colapso” y ya son varias las empresas están en una situación crítica porque les paran los embarques en Brasil.

En este marco, con todo el proceso de demora que se está registrando, varias de las novedades que se esperaban para este año (por estos meses) en el mercado argentino, están entrando en una suerte de stand by. “Más allá del tema producción –que siempre estamos corriendo- se suma el hecho que no sabemos cuándo podremos traer los autos –de Brasil o de otros destinos- porque los procesos de homologación vienen muy demorados”, explicaron de una empresa de origen europeo que se encuentra gestionando –aún- dos de las novedades que estimaba incorporar a su oferta en este complicado veinte doce.