VOLKSWAGEN AMAROK: ARGUMENTOS QUE SE IMPONEN

La marca alemana comenzó con la presentación a la prensa nacional e internacional de la Amarok en un Bariloche que se ofreció con temperaturas más amigables a las altas sensaciones térmicas capitalinas y paisajes sencillamente irreprochables.

De esta manera y durante los próximos 12 días –divididos en grupos de 40 personas-, las pick ups deberán pasar una y otra vez por las mismas exigencias tanto en on- como en off road, en un circuito diseñado y preparado por un equipo con sello y raíces 100% Alemania.

TM participó de la segunda jornada de presentación para tomar un primer contacto con la nueva estrella del grupo. Los argumentos de la marca para sumergirse en un terreno desconocido hasta el momento son numerosos y hasta tanto sea sometida un test de rigor… no hay objeciones… la misma “chata” se encargó de validarlos.

La dinámica del evento, simple: una vez llegados a Bariloche (divididos en equipos: compartimos la unidad N°7 con los amigos Fernando Soraggi (Al Volante) y Carlos Angió (Mega Autos) partimos directamente a la ruta para probar las aptitudes de este nuevo modelo en un circuito de más de 200 kilómetros que incluyó además del on road, un interesante off road.

Del Aeropuerto a Fortín Chacabuco. Algunas desviaciones o pérdidas en el camino, no impidieron que se llegara a tiempo. En el trayecto y en ruta el andar de la Amarok es sencillamente el de un auto. Por confort, amplitud del habitáculo e insonorización, el viaje resultó placentero.

El motor de la Amarok que nos llevó por los caminos que rodean al Nahuel Huapi (se fabricó el 29 de agosto de 2009) es el 2.0 TDI de 163 CV con sistema de inyección directa common-rail y sobrealimentación mediante dos turbocompresores en serie que ofrece un torque de 400 Nm a partir de 1.500 rpm (torque que se hizo sentir). El 2.0 viene acoplado a una caja manual de 6 velocidades, precisa, de recorridos cortos y buena relación.

El diseño y el estilo de esta pick-up de 5,26 metros de largo y 1,94 de ancho marcan una nueva referencia y habilita -por espacio y por cumplir con las leyes vigentes- llevar a cinco personas sin problemas (atrás es el espacio para una persona alta es aceptable, al menos las rodillas no pasaron factura durante el trayecto). Cuenta con cinco cinturones inerciales, cinco apoya cabezas (el trasero central es del tipo pestaña) y ganchos Isofix.

El tablero para el mercado local es de plásticos duros grises y negros muy sobrio y lo más destacable es el volante –digno de un alta gama- con buen agarre (grip para los más puristas. (En algunas de las unidades la combinación era gris/ marrón pero esa se descarta para su venta aquí atendiendo el gusto del consumidor local). (Algunas de las unidades preparadas para el off road contaban con una pantalla central touch screen de 7 pulgadas pero no están pensadas para el mercado local sino para el Viejo Continente… el costo aquí la dejaría en jaque).

Continuando con algunas de las anotaciones sobre el interior, en la parte superior de la plancha central cuenta con una toma de 12 volt, (otra junto a la caja de cambios) lugar como para poner un GPS (elemento que no descartan en la lista de los accesorios). La gaveta central –arriba del equipo de audio- tiene algunas rebarbas y carece de un material que permita amortiguar el golpeteo de lo que allí se ponga. La guantera es de reducidas dimensiones pero se complementa con espacios varios para poner cosas como en los que se encuentran en las puertas y el apoyabrazos central (con tapa suelta).

A pesar de la amenaza del frío, el día y la ruta demandaron poner el aire acondicionado de buena respuesta y botones muy sensibles (las plazas traseras no tienen salidas de aire).

Los asientos no son deportivos pero tienen buena sujeción y al menos el cuerpo en 270 km no acusó recibo (los respaldos de los asientos delanteros no cuentan con bolsillos). Los vidrios trasero bajan por completo (y one- touch). Los espejos exteriores cuentan con una buena superficie.

Dejando la ruta atrás, el grupo ingresó a la estancia Fortín Chacabuco. Allí se dejaron las unidades asignadas para pasar tomar el control de los vehículos listos para el off road (más preparado ¿?).

Luego de las indicaciones previas del instructor alemán (en nuestro caso fue Rainer -con quién se pudo amenizar el inglés con algo de castellano gracias al medio año que vivió en México) nos sumergimos en la pista -que hay que destacar: además de divertida contó con exigencias varias tanto para el vehículo como para los conductores.

Con la 4×4 low (caja reductora o baja) y en primera –luego de las indicaciones de Rainer- la actividad impuso atravesar un terreno bastante empinado … no apto para impresionables (como el saco de quien escribe) pero se pasa sin mayores inconvenientes aunque la sensación es que en cualquier momento queda de costado.

El recorrido impuso manejo de muñeca: maniobras cortas, trepadas, bajadas; agua, arena blanda y frenadas en pocos metros. En estos escollos se superaron con el control de ascenso y descenso que facilitaron ampliamente el lanzarse a trepar o bajar una montaña hasta para los más respetuosos de este tipo de vehículos.

Al trepar la “pared” dispuesta en el inicio del circuito, la indicación nuevamente fue: “no toques nada, nada de acelerador”. Haciendo caso… el control de ascenso actuó y la pick up comenzó a trepar con una única imagen por delante: el cielo. Cuesta abajo –lo mismo- hay que dejarla solita que… los enanos internos actúan instantáneamente. Sin tocar absolutamente nada (salvo que no se vaya el volante) todo lo hace sola y “es muy fácil”, como repitió en numerosas oportunidades Rainer.

El primer recorrido del circuito se hizo con el tradicional ABS y en la segunda vuelta fue el turno de conectar el ABS off road, sistema que –se comprobó- reduce significativamente la distancia de frenado en terrenos de ripio, tierra blanda y suelta (como en este caso) y el barro. El ABS off Road actuó y la cosa cambió. El vehículo frenó en estos terrenos como si se fuera en el asfalto.

Luego de los ascensos y descensos, el último tramo llevó al equipo hasta el río Limay. Los 40/ 50 cm de agua se pasaron sin inconvenientes.

El grupo nuevamente tomó contacto con las unidades inicialmente asignadas para continuar con el recorrido. Esta vez: ir por ripio en camino de montaña…ascenso y descenso, curvas y contra curvas pronunciadas (en la zona de Traful) que requirieron estar atentos y no confiarse. Rienda corta.

El recorrido concluyó en el Llao Llao –donde se realizó la conferencia de prensa. Esta es una primera mirada, un primer acercamiento y contacto con la nueva estrella de la firma alemana que combina buen agarre en terrenos difíciles y un suave andar en ruta y una artillería tecnológica mas que interesante.

Estos son algunos de los argumentos que presenta VW para –en un plazo de dos años- arrebatarle el liderazgo absoluto e indiscutido que tiene la Toyota Hilux. Pero el mercado finalmente será el que de su veredicto y las precisiones más técnicas sobre el comportamiento de la Amarok… una vez que se realice el test de rigor.