Falta muy poco para que las rutas de nuestro país comiencen a tener más tránsito que de costumbre. Las vacaciones incrementan el tráfico diario en todas y, desgraciadamente, las cifras de accidentes también aumentan por imprudencias, mal estado de los vehículos y de la calzada, mal descanso de los conductores, alta y baja velocidad, y otros factores que se pueden evitar.
Por eso, TiempoMotor pasó el fin de semana por el autódromo de Buenos Aires donde el Turismo Carretera desarrolló la 14ª fecha del año y les pidió algunos consejos de manejo a los pilotos, quienes recorren miles y miles de kilómetros durante el año y tienen gran experiencia a la hora de sentarse al volante por algunas horas.
“Para salir a la ruta hay que tomar varios recaudos. Controlar el estado y la presión de las gomas, los frenos y todo su sistema que no tenga pérdidas, todos los líquidos del motor y, principalmente, estar descansados. Una vez en el auto, ponerse el cinturón de seguridad, encender las luces y salir, estando atento a lo que haga uno y los demás”, manifiesta Gabriel Ponce de León, quien recorre aproximadamente 10.000 kilómetros por mes.
Pero las distintas condiciones climáticas y del asfalto por el que se transite, como así también el momento del día, pueden influir en el manejo, por lo que cada situación fue consultada.
A Jonatan Castellano, hijo del famoso Pincho, le preguntamos qué recaudos hay que tener a la hora de encarar la ruta con lluvia. “Primeramente hay que reducir la velocidad y tener precaución en las distancias con los demás vehículos. Todas las distancias se extienden considerablemente con un asfalto mojado y sucio con barro de los caminos o banquinas. Pero lo primordial para este tipo de adversidad es contar con neumáticos con buen dibujo; si no tienen el dibujo mínimo, no hay que salir. Y el ejemplo más eficiente para darse cuenta del dibujo es la moneda de un peso. Si la colocamos en las ranuras de las cubiertas, no vemos la parte plateada, están bien. Ahora, si la vemos, no hay que salir porque podemos tener problemas con el agarre y la estabilidad del auto”, comentó Pinchito.
Juan Marcos Angelini, otro representante de Dodge en la categoría, agregó otro consejo. “Hay que realizar maniobras suaves ante un día de lluvia para evitar el aquaplanning, o deslizamiento. Y ser muy cuidadosos a la hora de frenar. Uno de los principales problemas con inclemencias del tiempo son las maniobras bruscas, entonces no hay que pegar volantazos ni frenar bruscamente, porque las cosecuencias pueden ser muy graves”, dijo el Tati.
Otro de las situaciones en las que se producen los peores accidentes es por la noche. El cansancio, el mal cálculo en un sobrepaso y la excesiva confianza pueden ser factores que causen una tragedia. Y Mariano Werner da algunas recomendaciones para llegar a destino sin problemas. “Estar descansado es la clave. Siempre que viajo de noche temo de lo que puedan hacer los demás, entonces voy muy atento a lo que hagan. Por ejemplo, algo que hago siempre es realizar un guiño de luz alta al que viene de frente, para asegurarme de que venga despierto. Si no responde, estaré mucho más atento a lo que pueda pasar”.
El experimentado Juan Manuel Silva dio otras sensaciones que les pueden servir a la hora de conducir de noche. “Hay que tener cuidado con los animales sueltos y, principalmente en las rutas del norte de nuestro país, a la gente que transita en bicicleta o moto con escasa o nula señalización. Por eso de noche yo voy siempre por el medio de la ruta, para tener más opciones para maniobrar”, señaló el chaqueño, quien cuando tiene que superar a un vehículo más lento y viene otro de frente, posee una técnica para saber por dónde viene.
“Más allá de la experiencia de cada uno en saber la distancia a la que está el vehículo que se aproxima y su velocidad, una de las prácticas que siempre empleo es la de mirar al de frente, meterme atrás del coche, camión u ómnibus que me antecede, salir nuevamente un segundo para tener la referencia nuevamente, porque muchas veces creemos que estaban más lejos o más cerca y con ese nuevo pantallazo podemos tener una noción más cercana”.
Y son los sobrepasos quizás los más traumáticos para un conductor que no está acostumbrado a manejar en ruta, que por, error de cálculo o arrepentimiento, provoca un desastre. “Uno tiene que tener recaudos a la hora de pasar a otro vehículo, y para mí es importantísimo anticipar las maniobras. Mirar bien lo que pasa adelante, mirar para atrás, para asegurarse de que no venga otro más rápido, y estar seguro de que se puede acelerar para comenzar la maniobra. Además, señalizar siempre lo que uno va a hacer, poniendo las luces de giro para cambiar de carril y para regresar al que venías transitando. Y otra previsión que tomo es tener buena visibilidad. Por eso me preocupo de que el parabrisas siempre esté limpio, de contar con agua en el recipiente de los sapitos y que las luces funcionen correctamente”, aseguró el joven Agustín Canapino.
Para finalizar, Christian Ledesma contó su técnica para rebasar vehículos más lentos. “Siempre veo a mucha gente que viene a una determinada velocidad, frena bruscamente a la cola del que va más despacio, y cuando pasa el que viene de frente, comienza a acelerar a fondo para pasarlo. Esa gente no se da cuenta que pierde muchos segundos que pueden ser fatales. Cuando uno viene transitando por un carril y se encuentra con otro más despacio, lo ideal es desacelerar para que, cuando pase el coche o camión de frente, acelerar con el mismo impulso con el que venía. Así no se pierde tiempo frenando ni acelerando después en marchas mucho más bajas de la que se venía”.
Ellos tienen años y años en las rutas y autovías de nuestro país para ir de una carrera a otra. Eso les da un plus, pero no porque son pilotos, sino porque van adquiriendo experiencia y que, en esta nota, trataron de compartirla.