Por primera vez todos los actores de la cadena de valor que conforman el Sector Automotor se dieron sita en la Sede de SMATA, hecho inédito en la historia argentina.
El motivo fue presentar un documento en el que se trabajó en conjunto durante 11 meses, elaborando el “Plan Estratégico de la Industria Automotriz 2030”, impulsado por el gremio.
En la presentación en que se detallaron los lineamientos y objetivos de este trabajo, estuvieron presentes el presidente de la Nación, Alberto Fernández, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, el Ministro de Relaciones Exteriores Felipe Solá, gobernadores, intendentes, legisladores, representantes de las terminales automotrices ADEFA, concesionarios ACARA, autopartistas AFAC, el movimiento obrero e invitados.
En ese marco, el secretario general de SMATA, Ricardo Pignanelli, destacó que “una ley para la industria automotriz será el instrumento para que este actor fundamental para el desarrollo económico y social del país alcance todo su potencial. Siempre estuvimos a disposición del diálogo equilibrado porque esa es nuestra esencia. En las diferencias vamos a tener discusiones, pero de las discusiones siempre salieron los consensos”.
En ese sentido, el presidente Fernández, agradeció al sector ser el responsable de dar el puntapié para un nuevo contrato social. “Este encuentro sintetiza lo que estamos proponiendo a los argentinos. Que los que producen y trabajan concilien intereses para hacer crecer a la Argentina. Sólo pido un lugar en esa mesa para que el Estado esté presente y se concrete más rápido”, dijo Fernández.
En referencia a los acuerdos Mercosur y unión Europea señaló que “Vamos a abrir los mercados a todo lo que sirva para que nuestra industria sea más fuerte, y no en contra de Argentina”. “Esa idea de que abrimos las puertas al mundo e importamos y así somos parte de ese mundo es una enorme idiotez”.
Por último también señaló que espera que “este plan permita darle a los argentinos lo que los argentinos merecen, autos accesibles, a precios accesibles para que puedan cumplir, algunos, el sueño de su primer auto …”
Para alcanzar esa meta deberían bajar los impuestos, y aunque el Jefe de estado se comprometió a dar apoyo, vale la frase “Res non verba”, ya que a menos de una hora de pedir un lugar en la mesa, mandó al congreso la modificación del Artículo 39 de la ley de impuestos internos modificando la base imponible y alícuotas (leer aquí).
El Proyecto
El “Acuerdo Social y Productivo para el Sector Automotor Argentino” elaborado por los todos actores de la cadena y coordinado metodológicamente por el centro CONSENSUS de IAE Escuela de Negocios de la Universidad Austral, prevé, a través de un proyecto de Ley Marco que próximamente ingresará al Congreso, que la industria automotriz sea definida como:
• “estratégica” para la producción nacional
• sector generador de empleo calificado
• el potenciamiento del sector como modelo de exportación
• atraer nuevas inversiones
Para cumplir con los objetivos planteados y definir una futura agenda de trabajo, se han fijado 7 ejes estratégicos
1- Instituto de la Movilidad
2- Fomento a las nuevas inversiones
3- Competitividad tributaria
4- Inserción internacional
5- Logística e infraestructura
6- Autopartes e insumos
7- Mercado Interno
El sector en números
El sector comprometió inversiones por más de 5.000 millones de dólares en el período 2017 – 2020, y el objetivo del Plan es alcanzar los 22.000 millones para el 2030.
Para ello se espera cuadruplicar la producción de 330.000 a 1,8 millones de unidades, emplear a 1,3 millones de argentinos y lograr una participación del 14% en el PBI Industrial (actualmente es 6,6%), además de generar exportaciones por 46.000 millones de dólares.
Este Plan Estratégico 2030 prevé contar con una Ley Marco de la Industria Automotriz, para cumplir un doble objetivo: defender y potenciar los puestos de empleo para la mano de obra calificada argentina e impulsar el desarrollo de toda la cadena de valor.
“Declarar al sector automotor como estratégico es brindarle un marco y compromiso federal para poder construir una industria sustentable de cara al futuro”, dijo Gabriel López, presidente de ADEFA.
AFAC
El presidente de AFAC, Raúl Amil explicó que, para una estrategia productiva con escalas económicamente sustentables, “resulta imprescindible un esquema de especialización y complementación productiva con el Mercosur, la región y el resto del mundo. No hay cadenas de valor sustentables si alguno de sus eslabones no lo es, por eso se requiere un enfoque sistémico. No hay sectores competitivos, hay proyectos que son competitivos”.
Pero al consultarle si habían evaluado el nivel de inversiones necesarios del sector durante la próxima década para contribuir a que la industria sea más competitiva, ampliando la base productiva de piezas que incrementen la integración local – actualmente ronda el 30%-, Amil nos respondió que era prematuro estimar el grado de compromiso que tomará el sector que representa.
Actualmente las terminales Argentinas tienen una capacidad instalada total de 1.2 millones de unidades/año y proyectan inversiones que permitan crecer hasta 1,8 millones en la próxima década.
Entonces es válido preguntarse ¿será viable que se desarrollen nuevos proovedores para una industria que viene funcionando al 25% de su capacidad? ¿Cuáles son las políticas que debería establecer el sector para que ese crecimiento sea sostenible? ¿Que acuerdos deberían establecerse y rubricar con los gobiernos nacional y provinciales?
ACARA
Ricardo Salomé, presidente de ACARA expresó: “el hecho de que estemos trabajando todos juntos con la generosidad que ha venido sucediendo, es el primer paso para recuperar el mercado interno, sin mercado interno no hay industria posible. ACARA está firmemente comprometida en aportar en esta cadena de valor, en fortalecer esta unión y priorizar los objetivos colectivos. Nuestro sector debe ser protagonista en la recuperación del país que ya se ha puesto en marcha”.
Pero más allá de estos esfuerzos, días atrás, el representante de los concesionarios nos expresó que es fundamental para el sector la reducción de impuestos (aumento impuesto interno), debido a que estos son un gran porcentaje del precio de un vehículo. Además que su rentabilidad se ve seriamente afectada, entre otros por ingresos brutos.
En este sentido y tras unos días de algarabía, hoy el gobierno nacional dejó sin efecto el Pacto Fiscal a través del cual las provincias reducirían la alícuota de los mismos que favorecía al sector.