
Al consultar este tema entre las terminales automotrices, afirmaron que en ese segmento “la gente prioriza el confort antes que la seguridad; es decir, el MP3 o las llantas de aleación antes que los airbags o el ABS”. Al mismo tiempo, la mayoría de los usuarios y compradores de vehículos aseguran que los dispositivos de seguridad “resultan muy caros cuando se ofrecen como opcional”.
A raíz de lo argumentado por ambas partes, CESVI realizo un análisis para ver cómo incide el precio de este dispositivo de seguridad en caso de tener que reponer los airbags después de un siniestro. Con fines comparativos, no se consideró para el total de repuestos los pretensores de los cinturones de seguridad, ya que no todos los modelos analizados los traen.
En el segmento de autos chicos, donde los valores de las unidades 0km van entre los 45.000 y 60.000 pesos, reponer el sistema Airbag (airbags frontales, plancha de abordo y módulo del airbag) cuesta entre $4.500 y $12.500 lo que significa del 8% al 29% del valor del vehículo 0km. Ahora bien, si se suma el resto de los repuestos que pueden resultar dañados en un impacto delantero, es decir, capot, guardabarros, óptica, rejilla, radiador y condensador, sumado a la mano de obra, los valores aumentan desde $16.400 a $24.700, lo que representa desde un 31% al 54% del auto 0km.
Más allá del alto valor en relación al precio del auto sin rodar, hay otro componente que aumenta ese índice: a medida que el automóvil envejece va decreciendo su valor de mercado, pero el precio de los repuestos se mantiene estable.
Compararon estos índices con estudios hechos año a año desde el 2004 a la fecha y prácticamente se mantuvieron sin cambios. O sea, los repuestos de seguridad continúan costando (en relacion al precio del 0km) lo mismo que hace 4 años. Uno podría pensar que así como los celulares o computadoras o cualquier otro elemento de nueva tecnología bajan su costo en el corto tiempo, con los airbags debería pasar lo mismo. Pero no es así, señala el informe.
De la comparación se desprende también que la política de precios de las piezas de seguridad para las distintas terminales es diferente entre ellas. Los costos de producción de esas partes no cambian radicalmente de un vehículo al otro ni de una marca a otra, ya que la materia prima utilizada y en gran medida los proveedores, son los mismos.