La casa gala renovó estética y tecnológicamente toda la gama del Mégane, tal había anticipado con la versión RS, la más potente de la familia.
En esta oportunidad lo más destacado es la incorporación del Mégane E-Tech, la versión inédita híbrida enchufable, que se suma a las variantes plug-in hybrid de la marca del rombo, como los Captur E-Tech (leer aquí) y el Clio (leer aquí).
Europa va a la vanguardia de las nuevas tecnologías, sobre todo aquellas amigables con el medio ambiente, y el arribo de versiones electrificadas al portfolio de Renault, no hace más que confirmar el compromiso de la marca francesa con las nuevas normativas de emisión en todos sus productos.
Diseño
La segunda fase de la cuarta generación del modelo, según su denominación “Mégane IV fase 2”, no presenta grandes cambios a nivel diseño donde recibió un pequeño retoque en el paragolpes en la zona del marco de los faros antiniebla, ahora rectangulares y con un detalle cromado en el centro y nuevos faros con iluminación Led.
Lateralmente incorpora nuevas llantas de aleación, y en la parte trasera al igual que en la ópticas delanteras se modificó el diseño interno de los faros.
Habitáculo
Puertas adentro del Mégane IV fase 2 nos encontramos con una pantalla vertical de 9” para el sistema multimedia e instrumental 100% digital, que para la versión E-Tech agrega información y funciones específicas como autonomía y nivel de carga de las baterías.
Seguridad
En el rubro de la seguridad, el Mégane IV fase 2 incorpora nuevos sistemas de asistencia a la conducción: frenado automático de emergencia con detección de peatones, control crucero adaptativo con función para embotellamientos y alerta de cambio de carril involuntario.
Mecánica
El Mégane E-Tech está equipado con una mecánica que combina tres motores, el mismo conjunto que utiliza la Captur E-Tech, motor naftero 1.6 L de 90 CV asociado a dos motores eléctricos de 65 y 30 CV respectivamente, que de manera combinada alcanzan una potencia de 160 CV.
La diferencia de potencia de los motores eléctricos radica en que uno sólo funciona como generador y motor de arranque, y el otro para impulsar al vehículo.
El conjunto mecánico se completa con una batería de iones de litio de 9,8 kwh de capacidad, brindándole a la unidad hasta 50 kms de autonomía eléctrica.
A lo mencionado anteriormente se suma la flamante caja de cambios multimodo, que carece de embrague y brinda cambios de marcha que, según Renault, se destaca por la suavidad de su funcionamiento, y que para priorizar el uso en modo eléctrico y/o el resguardo de la energía almacenada, incorpora el sistema de conducción Multisense, con tres modos de conducción: Pure, Sport y E-Save.
El modelo ecológico ostenta un consumo de combustible (nafta) de apenas 1,5 litros cada 100 kilómetros en la utilización mixta, además de emitir menos de 35 gramos de CO2 por cada kilómetro recorrido.
La nueva gama Mégane IV fase 2 junto con la nueva versión E-Tech, se lanzará al mercado europeo después del primer cuatrimestre. Por el momento la filial local ni siquiera analiza la posibilidad de importarlo.