El Grupo PSA Peugeot Citroën- cuya central regional opera en Brasil (y desde allí llega la data) confirmó que desembolsará unos u$s48,7 millones (R$ 91 M) en una nueva unidad para la producción de partes de motores en el complejo de Porto Real, en Rio de Janeiro. Pero de cara a 2010, según Vincent Rambaud, piloto regional del grupo galo, el consorcio tiene reservada una fuerte ofensiva de productos en Argentina y Brasil.
Durante la apertura de la nueva unidad de motores –en tierras del mayor socio del Mercosur- Vincent Rambaud habló sobre el presente y los próximos pasos del grupo. Si bien no dio señales de un potencial incremento de producción en Porto Real, reconoció que el grupo estaba perdiendo participación de mercado por el desfasaje entre producción y demanda. Es que no se esperaba que el Gobierno de Lula ponga en marcha tan rápido herramientas como la de reducción del IPI (Impuesto sobre productos industrializados) y que el mercado responda en forma tan sopresiva.
A pesar de ello, Rambaud señaló que las compras se concentran en los autos más populares y utilitarios deportivos. “No invertiremos en autos populares (economicos), tal vez el segmento de SUV sea un espacio que ocupemos en un futuro”. En junio, la participación del grupo en el mercado vecino fue de 5,1% -con las dos marcas.
De acuerdo con lo que dijo Rambaud, el grupo galo continúa con las misma proyecciones: alcanzar 300.000 unidades vendidas este año en Brasil. “Vamos a mantener las mismas proyecciones, las inversiones y los lanzamientos –tal vez cambie el ritmo-”, dijo. Hasta el momento Peugeot y Citroën tienen reservados más de cinco lanzamientos para el 2010.
En los planes del grupo también tienen proyectado un crecimiento de cerca del 1% de participación anual en el mercado del mayor socio del Mercosur. Para eso la compañía invertirá en imagen de marca. “El 2010 será muy fuerte en lanzamientos para el grupo en Brasil y Argentina”, resaltó Rambaud.
BRASIL SUSTITUYE IMPORTACIONES
En cuanto a las nuevas instalaciones, la fábrica- que cortó cintas el viernes- tiene capacidad para producir 100.000 bloques y 80.000 piezas de alumínio por año para los motores 1,6 litros (biocombustíble y nafteros). Hasta ahora los componentes de los impulsores eran importados de la fábrica de Jeppener de aqui de Argentina.
Con este movimiento, la empresa pasa –según afirmó el Nº 1 del grupo en la región- a reducir costos de importación y a optimizar procesos logísticos, lo que garantiza más agilidad en la producción para atender la demanda del mercado brasileño, que responde en forma positiva a pesar de la crisis.
“La decisión es estratégica para nuestros planes en Brasil porque garantiza una mayor independiencia respecto de la demanda y la reducción de costos”, señaló el presidente del grupo PSA Brasil y América Latina, Rambaud.
Los motores 1.6 equipan al Citroën C3 y Xsara Picasso; Peugeot 207, 207 SW y 207 Passion (sedan) fabricados en Porto Real. Los impulsores se exportan para aqui para la producción del Peugeot 307 y 307 Sedan y los Citroën C4 y C4 Pallas (sedan).
Los motores 2 litros y Hdi siguen saliendo de la planta de Jeppener.
Entre tanto, no descartó nuevas contrataciones ya que la nueva unidad de motores tiene espacio para ampliar un 20% su capacidad. Si el mercado brasileño confirma que realmente salio de la crisis, el grupo galo está preparado para volver a poner el pie en el acelerador.