Prueba Kia Carnival: cada vez mejor

Pocos vehículos tan de nicho como la Kia Carnival, un ejemplar que desde hace años dice presente en nuestro mercado y que es prácticamente único por la modularidad y la flexibilidad que ofrece para llevar un montón de pasajeros. Manejamos la única versión de esta nueva generación SX con un muy buen equipamiento, motor renovado y la modularidad de siempre.

Estética y equipamiento

Posiblemente coincidas con nosotros: la Kia Carnival es, cuanto menos, llamativa. Desde la anterior generación que Kia ya había elevado la vara y con esta nueva edición el modelo coreano ha vuelto a patear la estantería.

En sus 5,1 metros de largo se ve un producto que ha madurado y que tiene un diseño recontra moderno y atractivo, algo que unos años atrás quizás era difícil encontrar en un monovolumen. Tal es así que Kia se esforzó en denominar esta nueva Carnival como “Grand Utility Vehicle”, una suerte de mix entre multipropósito y SUV. Como sea, el resultado para nosotros es muy bonito.

Vamos adentro para conocer cómo viene equipada la única versión disponible (SX) de esta Carnival. Además de un excelente nivel de materiales, en materia de confort, climatizador trizona, techo solar panorámico, sensor de lluvia y de luces, acceso y arranque sin llave y sensores de estacionamiento delantero y trasero con cámara.

Del lado de la seguridad, la Carnival se destaca con siete bolsas de aire (incluyendo rodilla), controles de estabilidad y tracción y la incorporación de ADAS: mantenimiento de carril, precolisión, punto ciego, control de velocidad adaptativo (con stop and go), fatiga y conmutador de luces altas.

La posición de manejo es excelente, con un enorme butacón y la del conductor con regulación en altura y profundidad de manera eléctrica con lo cual la posición siempre va a ser la ideal. Y hablando de ideal, el tablero es digital, de 12” con un nivel de detalle, información y definición realmente sobresaliente.

Incluso en los “relojes” se reproducen las cámaras de los espejos que permiten ver el tráfico cuando uno acciona el intermitente, un detalle tecno muy interesante. A esa pantalla la complementa otra de mismo tamaño que oficia de central multimedia con conectividad android auto y car play y seis parlantes. De más está decir que el conjunto tiene una definición muy buena y la respuesta táctil es excelente. Para cargar los dispositivos, dos tomas de 12 V, 4 USB y un cargador inalámbrico.

Habitabilidad

Momento de hablar de la habitabilidad, quizás el apartado que más atención se lleva en esta Carnival. Al igual que en la antecesora, tiene espacio para 11 pasajeros aunque con asientos de diferente silueta que hará que algunos viajen mejor que otros. Están distribuidos en cuatro filas de asientos. La última hilera se rebate íntegramente y permite mejorar la capacidad de carga con un piso plano. La tercera fila es corrediza y también cuenta con la opción de reclinarse, mientras que los delanteros son ventilados, calefaccionados y poseen memoria.

De los 11, cinco asientos (la tercera fila y los centrales de segunda y tercera hilera son menos ergonómicos que el resto y, algunos, carecen de apoyacabezas), lo que permite una capacidad de baúl que varía entre 56 y 2.689 litros dependiendo de qué filas estén activas: el espacio es de 1.044, 975, 859 y 732 milímetros entre ellas.

Motor

No hay muchas novedades en el motor per se, pero sí en la revisión que le hicieron los ingenieros de Kia al conocido bloque 2.2 turbodiesel de, ahora, 202 CV (antes 197) y un torque de 450 Nm, con la posibilidad de optar por alguno de los tres modos de conducción (normal, eco o sport) que modifican la electrónica en pos de la eficiencia o la performance.

Las pruebas nos dieron 9,8 segundos para el cero a cien y un kilómetro en 30,7 mientras que las recuperaciones en el orden de los 7 segundos lo cual habla muy bien de la elasticidad de todo el conjunto incluyendo la caja de ocho velocidades que, independientemente de su correcto funcionamiento, no nos terminó de gustar la disposición giratoria, poco intuitiva y algo dubitativa.

Además de las prestaciones lo bueno del CRDI pasa por los consumos. A 100 km/h pide 6 litros “cada cien” y circulando a 130 esa cifra se va hasta 8,5. En el ciclo urbano, pese a su porte no pasa los 10 litros/100 km/h, muy buenos registros para un vehículo de su tipo. El tanque de combustible, de 72 litros.

Comportamiento dinámico/off road

Dinámicamente la Carnival se mueve muy cómoda pese a su origen extrazona, en parte, por su esquema trasero independiente que ayuda a copiar cualquier irregularidad y, además, los cortos voladizos también hacen que no haya demasiados roces indeseados en la zona inferior de esos componentes. Sí hay que tener en cuenta el ángulo ventral en alguna situación muy específica ya que se trata de un vehículo de 5,2 metros.

En ciudad su andar es fluido aunque algo áspero en algunas situaciones y en ruta es absolutamente un placer manejarla ya que va a sus anchas. Las llantas son de 17” aunque los neumáticos tienen un perfil que equilibra bastante con 65. Las curvas de mediana intensidad las toma de manera correcta y todos los controles activos y pasivos de seguridad velarán justamente por ella en caso de que algo salga mal. Todo, obviamente, en el contexto de que se trata de un vehículo de uso familiar o por lo menos en el que viajarán varias personas, con el consabido cuidado que hay que tener.

Precios y rivales

El universo de estos vehículos es complejo y finito. Carnival nunca tuvo rivales muy directos a excepción de la Hyundai H1 y la futura Staria cuya comercialización debería ser inminente. En su presentación, los directivos de Kia apuntaron a SUV de tres filas de asientos como Jeep Commander, Toyota SW4 y Chevrolet TrailBlazer aunque son competencia indirecta y difícilmente quien busque una Carnival piense en alguno de estos dos modelos y viceversa. En el horizonte aparece también la Mercedes-Benz Vito Tourer de ocho pasajeros.

Kia sabe que tiene entre sus filas un muy buen producto muy de nicho, prácticamente sin rivales y con un público muy fiel que al momento de pensar en la renovación seguramente tenga ojos para la Carnival y no mucho más. Allí, creemos, está el cliente de este modelo.