Cuando comenzaron a surgir los primeros “rumores” de que se pondría en marcha un plan para la adquisición de 0km se dio un efecto de rápida reacción en el mercado: “la gente sólo entra a preguntar cómo será el plan, cuándo arranca”, se escuchan en los salones de ventas. Pero sólo eso. El cierre de las operaciones prácticamente se paralizó y parte de los números de noviembre traducen esta situación.
El compás de espera parecía terminar cuando la presidenta CFK convocó a la cadena de valor del sector automotor y otras industrias para escuchar el esperado anuncio del “plan de contingencia”. Pero qué quedó de todo el anuncio… expectativa y desconcierto. Es que aún no quedó en claro cómo se pondrá en marcha, de qué manera, cuándo, quién asumirá el costo financiero, etc, etc. Mientras las ventas continúan detenidas y las primeras impresiones de los principales involucrados comenzaron a manifestarse.
En este sentido, desde la Asociación de Fábricas de Componentes (AFAC) se consideró que el anuncio fue “auspicioso”. No obstante, durante la etapa de consulta el eslabón de la cadena de valor –admitieron- no participó de la ronda.
“Tal lo manifestado por la Presidenta, se llevaron a cabo contactos previos solamente con Acara y Adefa, resultando llamativo que AFAC haya sido excluida de dichas conversaciones; sobre todo teniendo en cuenta que representa al sector que es el mayor empleador de la actividad automotriz argentina”, destacaron desde Afac.
“Por dicha falta de participación en el diseño de las medidas, se hace necesario analizar en detalle la instrumentación de las mismas, generándose ciertas dudas sobre cuál será el impacto efectivo en la actividad industrial local, sobre la producción de autos y su efecto multiplicador sobre el resto de la cadena de valor automotriz, en particular sobre el empleo del eslabón autopartista, el cual emplea a 62.000 personas, lo que equivale al 66% del empleo sectorial productivo, evidenciando el valor agregado que éste genera”, detalló la entidad en un comunicado.
“Si nos atenemos exclusivamente a los anuncios efectuados, surge cierta incertidumbre por eventuales efectos negativos no deseados que las medidas podrían generar ante una inadecuada instrumentación. Ello se fundamenta en que el patrón de especialización productiva planificado en los últimos años es diferente al de los modelos impulsados por los incentivos comerciales. Las posibilidades de las empresas, en su mayoría pymes, de sostener las estructuras productivas estará dada por el futuro de la actividad industrial local, la cual no necesariamente se correlacionará con la evolución de las ventas internas”, agregó Afac en la misiva.
Asimismo, a pesar del traspié pero en sintonía con la falta de información de cómo se instrumentará el plan, desde la entidad que nuclea a los proveedores agregaron que “el volumen de recursos destinados, de acuerdo a cómo sea implementada la etapa operativa, es de esperar que genere un impacto positivo sobre la economía en general. Resulta destacable que se priorice el interés en proteger el empleo”.
“Con el objetivo de sumarnos al esfuerzo colectivo que nos permita superar esta coyuntura, AFAC analizará en profundidad el contenido y formas de instrumentación de las medidas anunciadas a efectos de colaborar para su mejor y pronta entrada en vigencia”, finalizó el comunicado.
Desde el eslabón comercial también elevaron su opinión respecto de las medidas anunciadas por CFK. En este sentido, la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA) expresó a través de un comunicado que en virtud de los anuncios “manifestamos nuestro beneplácito con toda medida que tenga por objeto mantener los niveles de producción, consumo y fuentes de trabajo de la economía en general y del sector automotriz en particular”.
Desde la entidad presidida por Dante Álvarez, señalaron que con respecto a los alcances específicos del plan, “entendemos que el mismo permitirá el acceso al mercado de automóviles de 0 Km a personas que hasta el momento no han tenido esa posibilidad. Ello sustentado en un plan crediticio a tasas preferenciales y subsidiadas por el Gobierno Nacional, sobre modelos de bajo valor que serán definidos por cada terminal automotriz en consenso con el Gobierno Nacional”. (¿?)
“ACARA está a la espera de la efectiva reglamentación de las medidas anunciadas y se declara a disposición de las autoridades competentes para colaborar en la definitiva implementación de las mismas”, finalizó el comunicado.