Desde hace más de una semana, terminales e importadores tienen miles de unidades retenidas en el puerto de Zárate por la no liberación de los permisos. Tras conocerse el caso, de manera oficial el gobierno nacional se comprometió a revertir la situación, que por estas horas se está dando con la apertura gradual del corralito.
Paso a paso, diría Mostaza Merlo porque más allá de la demora del ok oficial para liberar las unidades, el volumen retenido sale de a poco, señala El Cornista.
La semana pasada, la ministra de Industria, Débora Giorgi, y su par de Economía, Hernán Lorenzino, les habían prometido a miembros de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara) y a algunos titulares de las automotrices que iban a liberar los autos.
El atraso habría sido consecuencia de que el único que autoriza las operaciones de importaciones, el polémico secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, estaba en Angola junto a CFK.
Finalmente, ayer por la mañana, Moreno comenzó a aprobar las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (DJAI) y las Licencias no Automáticas (LNA), ambos pasos necesarios que impuso la oficina estatal para poder importar y nacionalizar vehículos.
Pero no todas pudieron liberar sus unidades: todavía hay algunas marcas que están a la espera de que les envíen las DJAI aprobadas. Todavía hay demoras y como consecuencia de esta retención en puerto, varias tienen que seguir acumulando el costo financiero diario de tener las unidades en la playa descubierta que es de $100 por cada vehículo, señala el diario color salmón.
A ello se suma que a las siete embarcaciones que aún esperan para descargar, se les suman cuatro más que aguardan en la denominada “zona común” (de anclaje y maniobra).