MINI lanzó en Europa el Cooper SE, la versión con motorización eléctrica del modelo perteneciente al segmento B. Las novedades comienzan en el diseño exterior, característica que lo diferencia a simple vista del resto de la gama.
Diseño
Los cambios exteriores están presentes en el sector frontal, con nueva parrilla con el emblema de la versión eléctrica y color amarillo, también presente en los espejos y las llantas de aleación de 17 pulgadas exclusivas, que tienen una aerodinámica optimizada.
Habitáculo
En el interior, el Cooper SE también se diferencia de la gama convencional gracias a los detalles de color amarillo. Además, la batería está colocada debajo de la carrocería, lo que le permitió conservar la capacidad del baúl, con 211 litros que se pueden extender hasta los 731 l.
A lo mencionado anteriormente se suman los bajos carenados, mientras que el peso en vacío se ubica en los 1.365 kilogramos, 145 kg más que el Cooper S con carrocería con 3 puertas.
Bajo el capot
La mecánica del nuevo MINI tiene como protagonista principal al motor eléctrico que entrega 135 kW, lo que se traduce en 184 caballos de potencia. Además, cuenta con 270 Nm de torque en todo momento y una caja de una etapa asociada a la tracción delantera.
Con este conjunto, el flamante Cooper SE puede acelerar de 0 a 60 km/h en apenas 3,9 segundos, mientras que la prueba de 0 a 100 km/h la realiza en 7,3 segundos. La velocidad máxima, por su parte, fue limitada a 150 km/h.
El motor es alimentado por una batería de iones de litio que brinda una autonomía que varía entre 235 y 270 kilómetros. Se carga mediante la frenada regenerativa (se puede conducir con un solo pedal) y con un enchufe que permite la carga convencional (en tres horas y media) y hasta el 80% de la capacidad en apenas 35 minutos.