En el mercado argentino tanto Fiat como Chevrolet han marcado el camino al transformar a sus modelos Uno y Classic o Corsa, respectivamente en una suerte de vehículo utilitario. Bajo la denominación Cargo, estos modelos con los asientos delanteros unicamente y con sus ventanas traseras pintadas (selladas en el caso del Uno) se transformaron en una especie de camionetita para incrementar la oferta local. Salvando las distancias, este recurso aparece en la estrategia de MINI.
La firma controlada por el grupo bávaro BMW, iniciará la entrega de las primeras unidades de su nuevo modelo Clubvan, el primer MINI homologado oficialmente como vehículo comercial.
Desarrollado sobre la base del Clubman, el MINI estéticamente menos agraciado (para los integrantes de TM), el Clubvan contará con dos asientos y cinco puertas. Este vehículo dispondrá de un compartimiento de carga cerrado que cubrirá toda la superficie entre el portón trasero y los respaldos de los asientos delanteros.
Con una longitud de 3,96 metros y una altura de 1,68 metros, el nuevo MINI incorporará ventanas laterales selladas y pintadas en el mismo color que la carrocería, por lo que no se dejará ver la carga del interior del habitáculo.
Entre los elementos de equipamiento que podrá traer este vehículo se encuentran los asientos deportivos en cuero, listones embellecedores, faros de xenón, luz de orientación automática en curvas, retrovisores exteriores e interior con función de antideslumbramiento o el sistema de sonido MINI Boost CD o MINI Visual Sound.
El nuevo modelo de MINI se ofrecerá con tres variantes de motorización: los nafteros One Clubvan, con un propulsor de 98 caballos, el Mini Cooper Clubvan, con un motor de 122 caballos, y el Mini CooperD Clubvan, con una mecánica diésel de 112 caballos.