McLaren presentará en el concurso de elegancia de Pebble Beach la edición de carreras del flamante 650S. Se trata del650S Sprint, una edición aún más deportiva del superauto de la casa británica.
Tomando la base del 650S e inspirado en el 650S GT3 (un auto de carreras presentado recientemente), la nueva versión está construida a partir del chasis de fibra de carbono MonoCell, además de estar equipada con un mejorado sistema de frenos Steer, con el sistema de aerodinámica activa puesta a punto para la ocasión, suspensión más cerca del piso y chasis ProActive (PCC), con una con una configuración de competición.
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Respecto del modelo original, el Sprint posee una aerodinámica optimizada, al mismo tiempo que las entradas de aire frontales son de mayor tamaño para lograr un enfriamiento optimizado del motor V8 3.8 biturbo, el mismo que utiliza la versión de calle (650 CV) pero con una calibración específica que también se hizo extensiva a la transmisión, automática de doble embrague y siete velocidades.
La estética exterior sumó bandas decorativas en colores naranja y negro presentes en toda la carrocería, así como llantas de aleación multirrayo de 19 pulgadas que montan neumáticos slick de la firma Pirelli.
El habitáculo luce más austero, haciendo hincapié en la deportividad y con el objetivo de reducir el peso final del vehículo. A pesar de eso, cuenta con aire acondicionado, jaula de seguridad aprobada por la FIA, asiento de competición de fibra de carbono, cinturón de seguridad de seis puntos y sistema extinción de incendios.
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Cuando se ponga a la venta, al menos en su país de origen el McLaren 650S Sprint costará 198.000 libras, unos 330.000 dólares.