Latin NCAP, el Programa de Evaluación de Vehículos Nuevos para América Latina y el Caribe, dio inicio a la Fase VII de sus pruebas de choque, la cual tuvo como protagonistas a la Ford Ranger y al Chevrolet Sail.
La pick up es nada menos que el renovado modelo producido en la Planta Pacheco, el cual fue presentado recientemente en Argentina, donde tendrá su lanzamiento comercial el día 17 de abril.
La Ranger logró una calificación de 3 estrellas para los pasajeros adultos y de cuatro estrellas para los niños, una nota con sabor a poco pero que se debe a que la unidad evaluada no contaba con control de estabilidad, sistema que está presente en todas las versiones en el mercado local.
La chata contaba con tres airbags (también presentes en las versiones más accesibles en Argentina) y demostró que su carrocería es estable y “capaz de resistir mayores cargas”. De esta forma, ofreció buena protección durante los impactos frontal y lateral.
Desde este año, el programa amplió las exigencias en sus pruebas de choque. Por ejemplo, para lograr 4 ó 5 estrellas los modelos deben contar con control de estabilidad y aprobar la prueba del mismo.
Por otra parte, para obtener la máxima calificación, además deben tener un buen desempeño en los impactos frontal, lateral y de poste.
La mala nota fue para el Chevrolet Sail, un sedán del segmento chico que no es ofrecido en Argentina. La unidad evaluada fue ensamblada en Colombia con piezas chinas. ¿El resultado? Cero estrellas para adultos y niños. En este sentido, Latin NCAP indica que los modelos con cero estrellas en las pruebas de impacto frontal o lateral, tendrán una calificación final de cero estrellas.