La Cámara del Comercio Automotor (CCA) anunció que se comercializaron en Argentina 152.866 vehículos usados durante noviembre de 2021, un volumen 5,43% superior al registrado en el mismo mes de 2020 (144.994) y 8,53% mayor al de octubre de 2021 (140.854).
Por su parte, el acumulado entre enero y noviembre registró 1.538.981 vehículos usados que cambiaron de dueños. Se trata de un aumento del 13,47% respecto del mismo período de 2020, en el que hubo 1.356.299 unidades transferidas.
En noviembre, los Volkswagen Gol y Gol Trend fueron nuevamente los modelos con más transferencias: 9.183. Luego se ubicaron los Chevrolet Corsa y Classic con 5.582 y la Toyota Hilux, que registró 4.541 unidades.
La lista con los usados más vendidos en el país también cuenta con la presencia de los Renault Clio (3.841), Ford Fiesta (3.793), Fiat Palio (3.316), Ford Ranger (3.215), EcoSport (3.171) y Focus (3.170) y Toyota Corolla (2.974).
Por otro lado, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires registró un incremento del 36,46% en las transferencias de autos usados entre enero y noviembre, mientras que Tierra del Fuego la escoltó con una suba del 31,71%.
Luego se ubicaron La Rioja (27,43%), Jujuy (26,41%) y Santa Cruz (21,35%). Además, las provincias que bajaron sus transferencias en los once meses del año fueron San Juan (4,59%), Catamarca (2,31%) y Mendoza (1,16%).
“Ante el momento complejo que transita el país, la venta de autos usados volvió a crecer en noviembre. Faltando un mes para finalizar el año las ventas anuales ya superaron los 1,5 millones de vehículos y nos aproximamos al volumen comercializado en 2019 con 1,7 millones. Es importante aclarar que estas operaciones se realizan prácticamente sin financiación”, dijo Alberto Príncipe, presidente de la Cámara del Comercio Automotor (CCA).
“Nuestra institución viene trabajando en todo el país (actualmente hay 12.000 concesionarias de autos usados que emplean cerca de 45.000 personas) sobre las proyecciones económicas de las diferentes provincias para potenciar nuestro sector a partir del año que viene. Hoy la realidad del mercado es muy compleja pese a los números mencionados. Los stocks en los locales están prácticamente vacíos por falta de autos; algunos venden si en la transacción el comprador entrega otro auto como parte de pago; otros tratan de comercializar solo los autos que la gente les entrega para su venta y muchos directamente no venden porque no pueden reponer las unidades. Sumado a que los sobreprecios están a la orden del día”, agregó el directivo.
“Con este panorama y en un contexto económico parecido, los volúmenes a comercializar en 2022 estarían dentro de los actuales, pero si el Gobierno nacional logra una exitosa renegociación de la deuda y se encauza la economía, nuestro sector pasaría a ser parte importante del futuro, por su gran posibilidad de generar empleo rápidamente mediante los diversos segmentos que participamos en su recomposición”, finalizó Príncipe.