La Galera, además de ser uno de los coches más representativos de la época de las Cupecitas, tiene entre otros récords el de superar los 200 km/h en competencia: fue en la Vuelta de Necochea de 1963 (31 de marzo) al marcar 203,526 km/h.
Forjada por Torcuato (30/05/1912) y Dante (10/01/1916), nacieron en Buenos Aires (más precisamente en Floresta), pero en 1923 la familia se instaló en Olavarría, donde en la calle Necochea 829 el padre, Torcuato, instaló su casa y un modesto taller mecánico en el que lo acompañarían y sucederían sus hijos.
La Galera contaba con un motor Ford V8 59 A-B con válvulas a la cabeza, ideado por los hermanos y que los convertían en imbatibles. El primer triunfo de los Emiliozzi fue el 24 de mayo de 1953, cuando se impusieron en la Vuelta de Chacabuco, reservada para pilotos no ganadores. Pero la victoria con todos los ases en la ruta fue en las famosas 500 Millas Mercedinas (13/09/53), quizás la competencia más importante del calendario después del GP Argentino, que remataba la temporada y que, dicho sea de paso, ganaron ese año.
El 26 de junio de 1966, los Emiliozzi finalizaron en segundo lugar detrás de La Coloradita de Bordeu, en lo que fuera la primera de las nueve victorias de esa temporada que lo coronarían campeón al balcarceño. A la carrera siguiente, y cuando los compactos y los Proto ya empezaban a brillar, los Emiliozzi presentaron un Baufer F-100 que solamente corrió Dante y que abandonó las carreras tras un importante accidente en Chivilcoy, en noviembre del 69′.