Se celebraron los 100 años del nacimiento de Juan Manuel Fangio, la mayor gloria del automovilismo argentino. Nacido en Balcarce, el máximo ídolo supo ganarse un lugar entre los más grandes, así como también el cariño y respeto de todo el mundo.
Y para festejar el cumpleaños del Chueco, se realizaron diversas celebraciones en su ciudad natal organizadas por la Fundación Juan Manuel Fangio, además de una cena en su honor que tuvo lugar en el mismísimo Museo Fangio.
Además, en el marco de la 5ta edición del Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires, la semana pasada fue presentado el libro “Siglo Fangio”, que muestra fotos y testimonios exclusivos de diferentes personalidades del deporte, de la cultura y del ámbito empresarial, así como de familiares y amigos.
A lo largo de su carrera, Fangio dejó un gran legado en Mercedes-Benz, marca con la que fue campeón mundial de F-1 en 1954 y 1955.
Además, el Chueco (como se lo conocía) ocupa el lugar más alto en el podio del automovilismo de alta competición por su maestría al volante, sus múltiples victorias en distintas categorías y sus cinco Campeonatos de Fórmula 1.
Sin embargo, no se lo reconoce sólo por su habilidad conductiva. Su honradez, humildad y talento hicieron de él una de las personalidades más importantes del país.
Además de sus logros deportivos junto a Mercedes-Benz, Fangio fue designado presidente del directorio de Mercedes-Benz Argentina, cargo que ejerció hasta 1987 y por ello la marca de la estrella lo tiene tan presente y es una de las impulsoras de estas celebraciones.
Ese mismo año la empresa le otorgó un agasajo único y especial al nombrarlo “Presidente Honorario y Vitalicio de Mercedes-Benz Argentina”, siendo la única persona que recibió este tipo de distinción a lo largo de toda la historia de la empresa.
Fangio dejó estas pistas un 17 de julio cuando transitaba los 84 años. Sus restos que fueron custodiados por una guardia de honor fueron velados en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, en el Automóvil Club Argentino y al día siguiente en el Museo de Balcarce.