Aunque hay versiones eléctricas e híbridas plug-in (enchufables), por el momento sólo llegará la híbrida, que está motorizada por un motor 1.6 de inyección directa Atkinson de 105 y 145 Nm de torque combinado con un eléctrico de 44 CV y 170 Nm de torque que en conjunto rinden 141 CV de potencia y 265 Nm.
La potencia es transmitida a las ruedas mediante una caja doble embrague de seis marchas y puede ser administrada mediante dos modos de manejo: Eco y Sport.
El primero optimiza la selección de marchas para ahorrar combustible, cambiando más temprano a marchas altas para lograr una excelente economía de combustible y el segundo sostiene las marchas bajas por más tiempo y combina la potencia del motor y del motor eléctrico para brindar el máximo potencial disponible.
Un dato a tener en cuenta es que a nuestro país llegará su reciente actualización, con múltiples modificaciones exteriores e interiores, y que su silueta le permite alcanzar un Cx de apenas 0,24, lo que le permite una menor resistencia aerodinámica y por ende ser más eficiente.
Por supuesto que el precio todavía es a confirmar dado el tiempo que falta y el escenario electoral que se aproxima. No sería descabellado pensar en una cifra similar a la que ofrece el Toyota Prius, su rival directo.