Mercedes-Benz preparó para el inminente Salón de Los Ángeles el SLS GT Final Edition, con el que la marca alemana despediría el exclusivo GT, sucesor del mítico “alas de gaviota”.
Es una edición limitada de sólo 350 unidades disponibles a través de sus carrocería coupé y roadster. Se destacará, en primer lugar, por su estética propia, con una personalización que lo vuelve más agresivo y deportivo.
Al menos en las imágenes, el coupé combina los tonos rojo y negro, mientras que el modelo descapotable se presenta con carrocería en tono blanco, también en combinación con el tono más oscuro.
El SLS GT Final Edition cuenta con llantas exclusivas en color negro en el coupé, y bitono en el cabriolet, además de pinzas de freno en tono rojo y diversas piezas construidas en fibra de carbono. Algunas de ellas son el capot, el deflector delantero y el generoso alerón fijo posterior. Estas piezas son las que le aportan la tonalidad bitono a la carrocería.
La mecánica del SLS GT Final Edition incluye el conocido motor naftero V8 de 6,3 litros construido por la división AMG y ubicado en posición central delantera.
En este caso, la potencia es de 591 caballos, transmitidos a las ruedas traseras.
La versión convencional del modelo cuenta con el V8 con una potencia de 571 CV asociado a una transmisión automática de doble embrague y siete velocidades, junto con la tracción posterior.
Presentado mundialmente en 2009, el SLS AMG cuenta con distintas versiones, como la roadster, la GT, la Black Series, la GT3 de competición y la variante con motorización eléctrica.
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