Opel presentó en Europa el Grandland X Hybrid4, la versión híbrida enchufable de su SUV perteneciente al segmento C que, como el Peugeot 3008 Hybrid4 (ambos son productos de Groupe PSA), utiliza un conjunto mecánico con tres motores.
el primer modelo híbrido enchufable de la marca cuenta con un motor naftero con 1,6 litros, inyección directa y turbocompresor, que entrega 200 caballos de potencia y se combina con dos motores eléctricos, uno para eje, lo que además brinda presencia de la tracción en las cuatro ruedas.
Cada uno de los propulsores eléctricos genera 109 caballos, lo que permite desarrollar una potencia total de 300 caballos y un consumo combinado (según el ciclo WLTP) de 2,2 litros cada 100 kilómetros recorridos (y emisiones de CO2 de 49 g/km).
El motor eléctrico delantero está acoplado a una caja automática con ocho velocidades, mientras que el propulsor eléctrico trasero se encarga de la tracción 4×4 cuando es necesario.
Por su parte, la batería encargada de la alimentación posee tecnología de iones de litio y 13,2 kWh de capacidad. Además, permite una autonomía en modo completamente eléctrico de hasta 50 kilómetros (según el ciclo WLTP).
La carga de la batería se puede realizar a través de un cable (forma parte del vehículo) con un enchufe convencional o mediante dispositivos que permiten la carga rápida en estaciones públicas y puntos de carga de pared domiciliaria, sistema con el que la tarea se completa en alrededor de una hora y 50 minutos. A eso se le suma el sistema de frenado regenerativo.
En el Grandland X Hybrid4, el motor naftero entra en acción cuando el vehículo circula a velocidades medias y altas. A velocidades más bajas, el protagonismo lo tiene la propulsión eléctrica. Asimismo, ofrece los modos de conducción eléctrico, híbrido (elige automáticamente el tipo de propulsión más eficiente), 4×4 (se activa el eje trasero electrificado) y deportivo.
