Las instalaciones de la marca del óvalo en Colonia, Alemania, se posiciona como la primera en fabricar la nueva generación del Fiesta y trabajará a un régimen (este año) de 148.000 unidades, que sumados a los del Fusion harán a partir de noviembre una producción diaria de 1.900 vehículos. Estas cifras suponen un empleo de capacidades del cien por cien.
La compañía explicó a través de un comunicado que más del 85% de los automóviles que produce Ford en Colonia son para la exportación.
El nuevo Fiesta estará disponible en carrocerías hatchback y sedán, aunque por el momento a este último sólo se ha visto como concept. Durante lo que resta del año, Ford espera sacar 148.000 Fiestas de la línea alemana, aunque también se fabricará en China, Tailandia y México para el resto del mundo, haciendo de este un modelo diseñado en Europa pero de ambición global. Fuera de la UE, su meta más fuerte es posicionar a la nueva línea de vehículos pequeños de Ford en los Estados Unidos
De hecho, no se trata de la simple producción de un nuevo modelo, el Fiesta se perfila para la marca del óvalo como la llave para aumentar sus utilidades un 10 por ciento.
Es que –tal como consigna Efe y AutoNews- Ford espera que la venta en los próximos años de nuevos vehículos pequeños en Norteamérica mejore sus beneficios en al menos un 10%, comparado con las cifras actuales. Esta valoración fue ofrecida por el presidente de Ford en el continente americano, Mark Fields, durante un discurso en el Centro para la Investigación del Automóvil en la localidad de Traverse City, en Michigan (EE.UU.).
Fields, que ofreció detalles del plan de reestructuración de Ford y la nueva estrategia de futuro del segundo fabricante estadounidense de automóviles, agregó que la compañía elevará la proporción de elementos comunes de los Focus que se venden en los Estados Unidos y Europa del 20% actual al 90 por ciento.
En julio pasado, Ford confirmó que su estrategia para Norteamérica pasa por un mayor énfasis en vehículos pequeños basados en la nueva plataforma global C, la misma sobre la que se producirá el nuevo Ford Fiesta –basado en el concept Verve que se presentó en el Salón del Automóvil de Norteamérica.
“En Ford vemos el cambio de los consumidores hacia vehículos pequeños como una oportunidad en la que Ford está mejor preparado que nadie para responder utilizando la fortaleza de nuestra gama de pequeños autos europeos y nuestro rápido plan de producción global”, afirmó Fields.
En el 2004, el 70% de la producción de Ford en Norteamérica estaba centrada en camionetas y grandes todoterrenos (SUV). En la actualidad, el 60% de su producción son autos y "crossover”, pero la meta está dirigida para que a fines del 2010, el 75% del gasto de la compañía se destine a autos y crossover.
Ford considera que para el 2012 se venderán unos 6 millones de autos del tipo Focus en Norteamérica y 25 millones en todo el mundo, un 20% más que hoy en día. Fields señaló en el encuentro que para responder a esa demanda, dentro de cinco años, la compañía producirá al año casi 2 millones de autos pequeños basados en su plataforma C y 1 millón de medianos de la plataforma B.