Una nueva era comenzó en China. La competencia de Fórmula E, autos monopostos eléctricos, dio su puntapié inicial por las calles de la capital asiática y lo hizo de la mejor manera, porque se vieron sobrepasos, buenas maniobras y hasta un impresionante accidente en la última curva del circuito entre Nicolas Prost y Nick Heidfeld sin consecuencias para los pilotos.
El hijo de Alain había sido el gran dominador del fin de semana hasta el momento del incidente con Heidfeld, quien había avanzado al segundo lugar luego del cambio de autos realizado a mitad de la competencia. Pero una mala maniobra del francés al llegar a la última variante de la carrera hizo que los coches se engancharan y el Venturi del alemán saliera despedido hacia un muro, pegando de costado y volcando.
Así, Di Grassi pudo superar la zona del incidente y recibir la bandera de cuadros en primer término. “Es un sueño hecho realidad. Tuve la fortuna de estar en el lugar indicado al momento indicado. El equipo hizo un gran trabajo durante entrenamientos y clasificación. Cometimos algunos errores, pero estoy muy feliz de ser el primer ganador de la Fórmula E”, comentó el brasileño.
La segunda posición fue para el francés Franck Montagny, mientras que tercero se ubicó Sam Bird después de que Daniel Abt utilizara más energía eléctrica de la permitida y recibiera una penalización.
Di Grassi lidera el certamen con 25 puntos, seguido por Montagny con 18. La siguiente fecha de la categoría será el 22 de noviembre en Putrajaya, Malasia.