Volkswagen presentó hoy en el salón de Tokio un sorpresivo concept hibrido denominado Cross Coupé, cuya principal relevancia es la de adelantar el nuevo estilo que adoptará la futura gama todocamino del fabricante alemán.
Su diseño es sobrio bien al estilo de la marca teutona de los últimos años, y su carrocería mezcla los rasgos de una coupé de cuatro puertas con los de un SUV compacto. Tiene cuatro asientos individuales y tres motores, dos eléctricos y uno naftero. Puede recorrer hasta 45 km en modo eléctrico y la tracción puede ser delantera o total.
El Cross Coupé mide 4,34 metros de largo, 1,86 metros de ancho y 1,52 metros de alto. Es más largo que el Golf pero más corto que el Tiguan, y más ancho que ambos. La altura es mayor que la del Golf y menor que la del Tiguan. Su distancia entre ejes es de 2,63 metros, algo más que la del Golf y la del Tiguan. Pese a su diseño sobrio, de destacan las barras de la parrilla que se funden con las ópticas. También es peculiar el diseño interno de los faros y las nervaduras del capó.
El Cross Coupé lleva un motor naftero TSI de 150 CV y otro eléctrico de 40 kW (55 CV) que actúan sobre el eje delantero, juntos o por separado, y que dan un par máximo de 210 y 180 Nm, respectivamente. Hay otro motor eléctrico, de 84 kW (115 CV) y 270 Nm de par, que mueve las ruedas traseras si se utiliza el Cross Coupé en modo de tracción total o únicamente eléctrico, además de usarse en fuertes aceleraciones.
La potencia máxima, cuando los tres motores fucionan a la vez, es de nada menos que 265 CV. La caja de cambios es automática de doble embrague DSG y de siete velocidades.
Su consumo medio homologado acusa tan sólo 2,7 l/100 km. Esto es muy poco teniendo en cuenta sus prestaciones, ya que acelera de 0 a 100 km/h en 7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 201 km/h. En modo eléctrico la velocidad máxima llega a 120 km/h.