Symbar, una empresa perteneciente al Grupo Hasar, desarrolló loa precintos y sensores electrónicos, tecnologías que componen un sistema completo de gestión del riesgo logístico.
Los precintos son entregados en comodato y se pagan mensualmente (la cifra depende de la cantidad utilizada), a lo que suma el seguimiento satelital.
Destinados al control de la carga, pueden ser desactivado desde la plataforma y cuando el chofer avisa que llegó a destino. El conductor también lo puede hacer a través de una tarjeta RFID habilitada, así como un supervisor con la aplicación del teléfono. También lo puede programar, lo que evita que el candado se abra fuera del rango de la sucursal.
“Symbar instala la plataforma y capacita al cliente para utilizarla, ofrece soporte en la configuración de los precintos y en el armado de las rutas. En media jornada se puede dar una capacitación de la plataforma y enseñar a usar los precintos”, dijo Diego Del Popolo, Ejecutivo de cuentas deSymbar, quien agregó: “Así, el cliente tiene acceso a la plataforma y los usuarios, a través de la aplicación móvil del celular”.
La nueva tecnología llega como una alternativa a servicios de custodia, GPS y plataformas de posicionamiento vehicular. El objetivo es evitar las pérdidas surgidas por los “piratas del asfalto”.
La tecnología es ideal para las empresas que requieren un control de la carga tanto en el territorio nacional como internacional, debido a que también funciona en países limítrofes. Además posee una batería cuya duración puede ser de hasta tres meses.
El sistema ofrece la visibilidad de las cargas y el control de la operación física de la mercadería, además de brindar información en tiempo real de la ubicación y las novedades de la carga, y la optimización del costo de logística (brinda información sobre el tiempo de trabajo.
“Además de este cuidado de la mercadería, el precinto brinda información sobre la ruta, si hubo desvíos, emite alertas de excesos de velocidad, frenadas bruscas y hasta pueden adicionársele sensores de temperatura. Se puede seguir las entregas estando al tanto de los clientes por los que ya pasó el camión y cuáles le faltan y, en caso de que haya una eventualidad, avisar a la policía”, añadió el ejecutivo.
“Con el ABL típico es posible encontrar el vehículo que fue asaltado, vacío. En cambio, el precinto electrónico permite cerrar la caja del camión o el conteiner y bajar así el riesgo logístico, disminuyendo los gastos de custodia”, finalizó.