CHAK MOLOT: LA SEGURIDAD COMO BANDERA

La empresa rusa Chak Motors creó la Molot, una motocicleta de altas prestaciones y con un estilo futurista. Se basa en la Honda CBR 1000 RR (4 cilindros, 1,0 litros y 181 CV), pero suma mucha tecnología aplicada a la seguridad.

Construida a mano, su diseño se destaca principalmente por su carenado de líneas angulosas, a lo que se suma una carrocería realizada principalmente con fibra de carbono, mientras que el aluminio es otro de los materiales livianos utilizados.

Sin embargo, en lo más sobresale esta motocicleta es en la seguridad. Posee una iluminación con faros de LED para las luces altas y bajas, además de las de circulación diurna (también presentes en los espejos laterales) y en las luces traseras.

Otra de las cualidades de este producto es el Predictive Emergency Braking System (PEBS), un sistema creado específicamente para una motocicleta, que posee dos radares delanteros, uno de corto y otro de largo alcance, además de una cámara de alta definición montada en el faro. El dispositivo advierte al conductor -mediante una señal luminosa y una vibración en el manillar- acerca de un posible choque, y hasta puede frenar en forma autonóma la moto. Está complementado con los frenos con sistema ABS.

La Molot cuenta también con sistema de control de ángulo ciego (posee dos sensores situados en la parte trasera del carenado, uno a cada lado). El mismo da aviso al conductor mediante unas luces ubicadas en los espejos, además de realizar una vibración en el manillar.

También dispone de alerta de cambio de carril involuntario, un sistema que detecta pérdida de control y desactiva el acelerador, y cámaras de alta definición delantera y trasera, las cuales que graban todo con el vehículo en marcha o estacionado, imágenes que luego son almacenadas en una caja negra.

La Molot ofrece, por otro lado, un puerto USB para cargar los teléfonos inteligentes y una batería con tecnología de iones de litio en lugar de una convencional. Un diez en tecnología.