El grupo alemán ha concentrado su juego en un par de cartas fuertes. Por el lado de BMW el ancho de espadas es la nueva generación de la Serie 6, que en este caso se presenta como un concept de la versión coupé. Sin embargo, éste no es de los prototipos futuristas o que adelantan los futuros diseños de una marca. Podemos arriesgar que serán prácticamente las líneas definitivas de la nueva generación que saldrá el año que viene. Es una cupé 2+2 y presenta, entre muchísimas novedades, un juego de faros delanteros que funcionan únicamente con diodos luminosos y, además, el sistema de mando iDrive con una pantalla Control Display individual montada por separado.
En segundo plano, más que nada porque ya se había develado hace unos cuantos meses, quedó la nueva generación del X3, modelo del cual ya contamos todos los detalles (que podés encontrar en las noticias asociadas).
La carta fuerte de MINI, por otra parte, es el Countryman, no sólo porque ya empieza a venderse en el Viejo Continente, sino porque aquí se descubrió finalmente la versión WRC con el que la marca volverá a participar de manera oficial en el campeonato mundial de rally. Las otras dos marcas que participarán oficialmente de esta categoría también eligieron este escenario para presentar sus modelos de competición: Citroën mostró el DS3 WRC y Ford hizo lo propio con el Fiesta WRC. Los tres, una pinturita… Una más lindo que otro.