Desde 2020 la industria automotriz, así como tantas otras, está buscando sobreponerse a diferentes golpes que ha sufrido tanto ese sector como otros a nivel mundial producto de una pandemia que tuvo un impacto sustancial en lo económico y en la mano de obra.
2022 arrancó complicado, con una caída general relativa del 0,3% respecto de 2021 pero, yendo de lo general a lo particular, con registros más bajos debido a la menor cantidad de días hábiles de actividad en el primer mes del año.
En lo referido al sector autopartista, este redujo su actividad un 21,9% respecto a
enero de 2021 y un 38,3% contrastando diciembre de 2021. Sin embargo, al analizar la evolución de la actividad de los tres principales segmentos de negocio, los resultados varían.
La producción de vehículos se redujo un 23,3% interanual durante enero de 2022. Comparado con diciembre 2021, la caída es todavía mayor: 53,2%. Pero atención, porque esto responde a una disminución de 9 días hábiles de la actividad, totalizando 17.
Si bien la tendencia de la actividad de las terminales es acompañada por el sector autopartista, este último muestra una menor variabilidad por tener una mayor diversificación de sus actividades.
Las exportaciones de autopartes registraron durante este periodo un leve aumento del 2,8% interanual. Para el segmento de mercado de reposición (considerando las ventas de combustible como un indicador aproximado) se ve un aumento del 16,3% interanual para el mes analizado, lo que ha amortiguado la contracción de la actividad agregada del sector autopartista durante el primer mes de 2022.
Así las cosas, habrá que esperar posiblemente hasta fines de abril para conocer cómo fueron las cifras en febrero 2022, un mes que, siguiendo el indicador de los días hábiles, podría tener cifras similares a enero.