La quinta generación del Land Rover Discovery, el clásico todoterreno familiar de la marca británica, fue presentada durante el Salón del Automóvil de París 2016.
El nuevo SUV cuenta con un flamante estilo exterior heredado de sus hermanos de gama, lo que le brinda un look muy moderno. Además, tiene una generosa longitud total de 4,97 metros.
Entre sus claves, el nuevo Discovery continúa ofreciendo la “joroba” de la zona trasera del techo, donde además hay una pieza de cristal que permite sumar visibilidad al habitáculo, donde cuenta con capacidad para siete pasajeros.
Por su parte, el baúl cuenta con una capacidad que varía entre los 258 (siete plazas) y 2.500 litros (dos plazas).
Haciendo foco en la eficiencia, el chasis monocasco del nuevo SUV tiene 85 por ciento de aluminio, por lo que le brinda una reducción de hasta 480 kilogramos de peso en comparación con el modelo saliente.
En cuanto a la mecánica, el Discovery está equipado con un motor naftero 3.0 V6 con sobrealimentación, 340 caballos y 450 Nm de torque, y con los turbodiésel de la gama Ingenium: 2.0 Td4 con 180 caballos y SD4 con 240 CV y 500 Nm, además del TD6 con seis cilindros que desarrolla 258 CV y 600 Nm.
Cuenta también con una caja automática con ocho marchas, que a su vez se conecta con la tracción integral con bloqueo de diferencial central y trasero, además de incluir sistemas como el Terrain Response 2, que ofrece distintos modos de conducción para el off road, suspensión neumática que varía la altura de la carrocería y el All-Terrain Progress Control, que brinda la posibilidad de circular a baja velocidad de forma constante y sin intervención del conductor, quien sólo debe comandar el volante.
