Ya te lo habíamos adelantado y ahora la marca -a días del inicio del autoshow porteño- comienza a calentar las expectativas confirmando -de primera mano- los modelos que exhibirá. En este tren y luego de poner como ficha segura al Volt días atrás, desde las oficinas de Chevrolet ahora informan que el ícono de los muscle cars será de la partida.
Estamos hablando del ya clásico Camaro. Puntualmente, se exhibirá el deportivo en su versión SS que cuenta con una visual muy cercana al concept original y rescata la herencia de su primera generación, producida entre 1967 y 1969. El SS viene equipado con el motor más potente de la línea, que eroga 406 CV y se trata de un V8 de 6.2 litros, que tiene bloque y cabezales realizados en aluminio.
“El Camaro, al mismo tiempo que remite a un ícono, también muestra todo el diseño y la tecnología de Chevrolet. Sus líneas transmiten la sensación de la velocidad en la mirada. Son fluidas y transpiran deportividad”, señaló Carlos Barba, Director General de Diseño de General Motors Brasil.
Además de la potencia, el motor del Camaro está equipado con AFM (Active Fuel Management), desconexión automática de los cilindros. En velocidades crucero, es decir en un viaje tranquilo por una ruta, el sistema de inyección desconecta cuatro cilindros, reduciendo el consumo que puede ser evaluado por la computadora de a bordo, y aumentando significativamente la autonomía del deportivo.
En conjunto con los 406 CV de fuerza del Camaro, trabaja la transmisión secuencial/ automática de seis velocidades, exclusiva de la versión SS.
Su despeje del suelo es de 15,6 cm, y está equipado con llantas de aluminio delanteras de 20 x 8 pulgadas y traseras de 20 x 9 pulgadas. Posee neumáticos delanteros con medidas 245/45 ZR20 y traseros, 275/40 ZR20.