Chevrolet lanzó en Argentina las gamas 2019 de los Onix y Prisma, los modelos del segmento B producidos en Brasil, que recibieron cambios en la estética exterior, el habitáculo y el equipamiento.
La versión LT de ambos modelos agregó llantas de aleación de 15 pulgadas, parrilla con detalles cromados, espejos exteriores eléctricos, computadora de a bordo y tapizado de tela con dos colores.
La variante LTZ sumó tapizado de cuero ecológico, faros con lámpara Blue Vision, parante central de color negro High Gloss y flamante terminación interior Dark Galvanized.
Por su parte, el Onix Activ, la variante aventurera del hatchback, recibió nuevas llantas de aleación negras de 15”, interior Dark Galvanized, lámparas delanteras Blue Vision y columna central de color Negro High Gloss. A eso se le suma el interior Kalahari (sólo junto con el color exterior naranja Burning Hot), mientras que el interior Dark Galvanized se asocia con el resto de los colores.
Si nos referimos al Onix Effect, la versión con look deportivo, agregó llantas de aleación negras de 15”, faros con lámpara Blue Vision, tapizado con revestimiento premium.
Además, todas las versiones de ambos modelos incorporaron cinturón trasero central de tres puntos, comandos internos con nueva iluminación True White y cámara de visión posterior.
Las novedades se suman las características conocidas de ambos modelos, que ya contaban con aire acondicionado, dirección hidráulica, asientos y cinturón del conductor con regulación de altura, ABS con distribución electrónica, volante multifunción, apertura interna de baúl, anclajes Isofix y Top Tether, luces antiniebla traseras, OnStar y MyLink con pantalla táctil de 7” y compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay.
La mecánica sigue ofreciendo el motor naftero 1.4 con 98 caballos y 126 Nm de torque, combinado con la caja manual con cinco marchas o con la automática con convertidor de par, seis velocidades y modo manual.
