Pocas veces, y al parecer va a ser una de las excepciones, en una temporada de Turismo Nacional pasarán las doce fechas sin que se repitan ganadores. Hasta esta fecha de Viedma se cumplía a la perfección, porque en ambas categorías, no se había subido a lo más alto del podio el mismo piloto.
Pero en la final de la Clase 3, Juan Marcos Angelini (VW Vento) rompió la regla, porque venció de punta a punta en el trazado rionegrino y consiguió la segunda victoria de la temporada, como lo había hecho en la cuarta cita de Termas de Río Hondo.
Al Tati lo escoltaron Sebastián Gómez (Chevrolet Cruze) y Adrián Chiriano (Ford Focus), quien en los metros finales superó al poleman Ezequiel Bosio (Ford Focus).
Sobre el final se vivió un momento de tensión por un choque entre Matías Rossi (Citroën C4) y Leo Carducci (Seat León), puesto que Rossi fue derivado al hospital por un traumatismo de cráneo con pérdida de conocimiento. Sin embargo, al rato le dieron el alta tras realizarle estudios.
En el podio de la Clase 3 estuvieron Emanuel Moriatis (Ford Focus) y Alfonso Domenech (Renault Clio), campeones de sendas divisionales que se habían consagrado en la fecha anterior y a quienes les entregaron sus trofeos.
En la Clase 2 se mantuvo la regla, ya que Gastón Grasso se impuso con el Toyota Etios que estrenó hace apenas cuatro fechas atrás y festejó por primera vez un triunfo en la divisional. Al de Río Gallegos lo siguieron Pablo Ortega (Fiat Linea) y Federico Alonso (Ford Fiesta).
