La francesa Peugeot dará el puntapié inicial con la producción y venta de su primer vehículo Diesel híbrido, basado en el crossover 3008. Bautizado como 3008 Hybrid4, el modelo que se presentará en sociedad en poco tiempo más en el Salón de Paris, cuenta además con tracción integral.
El futuro integrante de la familia del crossover del león presenta algunas diferencias estéticas respecto de la versión “civil” y conocida aquí en la Argentina. El 3008 HYbrid4 se fabricará en las plantas de Sochaux y Mulhouse, ubicadas al este de Francia y vendrá a completar la gama del modelo que comenzó a producirse en diciembre de 2008 y arrancó su venta en Francia en 2009. Desde entonces, la firma del león ha fabricado más de 250.000 unidades de este modelo que desembarcó en la Argentina en junio con una demanda importante (y más de 100 unidades pre-vendidas).
El corazón principal de este león es el térmico gasóleo ya conocido dentro de las filas del grupo. El motor Diesel de 1.997 cc entrega una potencia máxima de 163 caballos a 3.750 rpm y un par máximo de 300 Nm. a 1.580 revoluciones. Transmite toda su fuerza únicamente al eje delantero, por medio de una caja secuencial de seis marchas.
El segundo propulsor es un generador eléctrico, que está alojado en la parte trasera del vehículo y transmite su potencia únicamente al eje trasero, entrega una potencia continua de 20 kW (27 CV) y puede llegar a ofrecer 27 kW (37 CV) en momentos puntuales. Asimismo, su par continuo es de 100 Nm., aunque puede llegar a 200 Nm. también en determinados momentos.
Para el generador eléctrico la compañía utiliza baterías de Níquel Metal Hidruro (Ni-MH) de Sanyo que van colocadas bajo el piso del baúl (reduce la capacidad de carga de 432 litros a 420 litros). Este pack de baterías de alta tensión se añade a la batería clásica de 12 V situada bajo el capó delantero y que continua ejerciendo sus funciones habituales.
De esta manera, entre ambos propulsores, el 3008 Hybrid4 puede ofrecer una potencia máxima de 200 CV y un par máximo que en determinadas ocasiones puede llegar hasta los 500 Nm.
Para que funcione sólo el motor eléctrico, el térmico o los dos de manera conjunta Peugeot se basa en el PTMU (Power Train Management Unit), un dispositivo electrónico que gestiona de manera automática y sin intervención del conductor, qué motor tiene que entrar en funcionamiento, siempre con el objetivo puesto en reducir el consumo.
ESTILO A MEDIDA
El modelo ofrece diversos estilos o modos de funcionamiento que se pueden elegir a través de un mando ubicado en la consola: Auto, Sport, ZEV y 4WD. En el primer caso, la electrónica del vehículo será la que se encargue de gestionar de forma automática las transiciones entre el motor térmico -gasóleo- y el eléctrico, buscando en todo momento un equilibrio entre consumo y prestaciones.
La posición Sport cambia la gestión del motor y las relaciones del cambio para que el vehículo gane en dinamismo. En caso necesario, además, el modo Sport hará que entre en funcionamiento el motor eléctrico, ayudando así al térmico y mejorando las prestaciones del vehículo.
La tercera opción es ZEV -Zero Emissions Vehicle. En este proceso y si las baterías del vehículo están completamente cargadas, el 3008 Hybrid4 funcionará únicamente con el motor eléctrico, evitando así la expulsión de emisiones contaminantes. No obstante, este modo de conducción únicamente podrá funcionar a baja velocidad y durante un número muy limitado de kilómetros.
Por último, la posición 4WD, que hace referencia a las cuatro ruedas motrices, convierte al 3008 Hybrid4 en un vehículo 4×4. De esta manera, el motor térmico acciona el eje delantero y el eléctrico es el encargado de hacer funcionar el eje trasero. Con esta solución, el 3008 Hybrid4 no se convierte en un todoterreno, aunque sí es probable que supere sin dificultad caminos que ofrecen mayor resistencia.
De acuerdo a lo que informó la casa matriz el 3008 Hybrid4 presenta un consumo combinado de 3,8 litros cada 100 kilómetros y unas emisiones de 99 gramos de CO2 para las unidades menos equipadas y de 108 gramos para las versiones más altas de gama.
El bajo consumo se debe además del motor gasolero y el generador eléctrico, a la ausencia de uniones mecánicas entre ambos ejes y la introducción del sistema Start/Stop de segunda generación.