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EDICION ESPECIAL DEL 911 SPORT CLASSIC

UN PORSCHE SOLO PARA 250 ELEGIDOS

La marca alemana tendrá unas cuantas novedades en el cada vez más cercano Salón del Automóvil de Frankfurt. Todo indica que jugando de local, allí debutarán las nuevas versiones del 911 Turbo, el 911 GT RS, el 911 GT3 Cup y la flamante edición limitada 911 Sport Classic.

Se trata de una versión limitada a sólo 250 unidades desarrollada por el Porsche Exclusive, la división de la marca especializada en la construcción de las versiones más singulares, y que tiene como objetivo rendir homenaje a uno de sus modelos más emblemáticos: el Carrera RS 2.7 de 1973, del que toma ese alerón trasero fijo tipo “cola de pato”.

La base estructural del Porsche 911 Sport Classic es el Carrera S de tracción trasera, pero con una carrocería ensanchada en 4,4 cm, al igual que el ancho de la trocha trasera también ampliada. En la parte delantera se nota un spoiler que aumenta la imagen agresiva del auto.

Además de estos cambios, esta edición limitada se diferencia por otros detalles concretos como el uso de cuero e hilo en la parte central de los asientos y paneles de puertas, el uso del cuero en el panel de instrumentos, el sistema de frenos cerámicos (propios de los autos de altas prestaciones), una suspensión deportiva que puede modificar la altura de la carrocería en 2 centímetros, un diferencial autoblocante, llantas de aleación de 19 pulgadas un nuevo techo de doble bóveda.

El motor es el conocido bóxer (es decir, cilindros opuestos) de 3.8 litros de cilindrada al cual se llevó de los 385 caballos originales hasta los 408 CV gracias a la incorporación de un nuevo colector de admisión. Como es un tributo a un auto de época, Porsche pensó que sería bueno retornar a las fuentes en algunos aspectos y es por eso que en esta edición limitada no habrá nada de cambios automáticos. El volver a las fuentes demandaba sí o sí una caja manual (de seis marchas).

Según los datos que entrega la empresa, el auto puede superar los 300 km/h de máxima y acelerar de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos. Si no lo pisás, Porsche dice que el consumo del 3.8 litros está en los 10,5 litros cada cien kilómetros (pero cómo hacer para no tentarse, ¿no?).

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