Como ya es habitual en Termas, los equipos tendrán a su disposición dos compuestos diferentes de neumáticos, el de siempre y uno que se utilizará sólo para esta fecha, más blando y más rápido en la vuelta, pero de menor vida útil. Así, una de las claves de este fin de semana será una correcta gestión del neumático y, para eso, la puesta a punto adecuada del auto por parte del equipo y una conducción precisa de parte de los pilotos van a ser fundamentales.
Para añadir mayor emoción, en esta oportunidad no habrá series ni penalizaciones por posición de campeonato y el domingo la carrera se disputará a 32 vueltas al circuito de 4.805 metros, una extensión de 11 vueltas más en comparación con la edición del año pasado.
“Sin lugar a dudas que el neumático blando es la clave de esta carrera y la mejor administración que podamos hacer de este compuesto será fundamental. Para esto necesitamos una puesta a punto que funcione rápido con la goma más blanda, pero que además no la degrade demasiado para poder aprovecharla la mayor cantidad de vueltas posibles en carrera. Nuestra experiencia de los años anteriores con esta goma será muy importante y la aprovecharemos para llegar a Termas con una puesta a punto adecuada”, expresó Diego Bruna, responsable técnico de la escuadra.