Mientras Argentina aguarda su turno para sentarse a negociar con México. El nuevo acuerdo temporal que sellaron Brasil y el país del norte está modificando el accionar de algunas terminales que operan en el país vecino.
Al cambio de dirección que aplicó Renault, en el marco del nuevo acuerdo de reducir las exportaciones de México a Brasil en un 30% durante los próximos 3 años, su socia global –la japonesa Nissan- decidió acelerar la construcción de sus nuevas instalaciones brasileñas.
En este tren, Nissan Motor, estaría acelerando los planes de expandirse en Brasil luego de que el mercado de automóviles más grande de América Latina decidiera reducir las importaciones de fábricas mexicanas, señala la agencia Bloomberg.
El acuerdo entre los dos mayores mercados de autos de la región se traduce en que “el crecimiento de la planta brasileña tiene que ser aun más rápido de lo que contemplamos”, dijo el presidente de Nissan, Carlos Ghosn en una entrevista en Iwaki, al noreste de Tokio. “La limitación de las exportaciones de México a Brasil hace que nuestra planta brasileña sea aun más necesaria”.
Las declaraciones son una muestra de la mayor urgencia de Nissan por aumentar la producción en Brasil, donde la compañía planea desembolsar u$s1.500 M y cuadruplicar su capacidad anual para 2014, luego que México acordara reducir las exportaciones al país un 30% durante los próximos 3 años.
La venta de vehículos ligeros en Brasil, que superó a Alemania en 2010, podría trepar a 3.8 millones de unidades para 2014, según estimaciones de Macquarie Group Ltd.
Nissan se ve más afectada que Honda y Mazda como consecuencia del acuerdo comercial, según estimaciones del Credit Suisse Group AG.
Nissan, que tiene sede en Yokohama, traslada el grueso de los vehículos que se venden en Brasil desde México (lo mismo sucede con Argentina), donde su producción anual de 600.000 vehículos es 10 veces mayor que la capacidad brasileña.
La japonesa planea iniciar la producción en la nueva planta que se instalará Río de Janeiro en 2014 a los efectos de incorporar una capacidad anual de 200.000 vehículos, según la compañía.