Noticias 360 Autos

FIAT SE BAJA DE LA COMPETENCIA

MAGNA LLEGA A PREACUERDO CON GM PARA HACERSE DE OPEL


El camino de Magna para hacerse Opel quedó allanado luego que Fiat anunciara que no tenía intención de acudir a la reunión convocada por el Gobierno alemán para analizar la necesidad de aportar fondos de emergencia para la marca.

La compañía ha hecho público un comunicado en el que indica que mantiene "su disponibilidad y su compromiso" para continuar las negociaciones con el objetivo de encontrar una "solución estable y duradera" para Opel.

"Las cuestiones surgidas en las últimas fases de la negociación, entre el martes y el miércoles, nos han sorprendido negativamente ya que no habíamos sido informados de ciertos datos e informaciones financieras claves que consideramos esenciales para formular una oferta de fusión seria", ha indicado el consejero delegado de Fiat, Sergio Marchionne.

El directivo se quejó por lo bajo por el hecho de que General Motors planteara que Opel necesitaba una financiación adicional de 300 millones de euros. Esta cantidad se sumaría a los 1.500 millones que el Estado alemán ha puesto como tope a los avales que está dispuesto a conceder hasta que la nueva empresa pueda valerse por si misma. "No es razonable que Fiat aporte fondos a una organización cuya situación financiera se desconoce hasta la fecha”, concluyó Marchionne.

UN FUTURO CON IDAS 
Y VUELTAS

Magna, con una plantilla de 70.000 empleados en 25 países, cuenta con la ayuda para su operación en Opel del consorcio ruso GAZ.
La oferta inicial que hizo Magna a Opel prevé una inversión propia y del banco ruso Sberbank de 700 millones de euros, de los que una parte estaría garantizada por el gobierno alemán.
Por lo que se conoce de sus planes, Magna -al igual que Fiat- planteaba recortar unos 10.000 puestos de trabajo, del total de 52.000 que tiene Opel en varios países europeos -Alemania, Suecia, Reino Unido, Bélgica, Polonia y España-, de los cuales 25.000 corresponden a las plantas germanas, donde asimismo está la central.
La decisión última sobre Opel corresponde a General Motors y el gobierno de Estados Unidos, pero el papel de Berlín es fundamental, en tanto que principal avalista de los créditos que precisará la filial europea.
Para General Motors, Opel es sólo un capítulo en la marea de problemas y monto de deudas del conjunto del consorcio.

A LA BAJA
Las acciones de General Motors alcanzaron un mínimo histórico, en lo que constituye un hecho simbólico antes de la inminente declaración de bancarrota de la compañía automotriz.
La acción de la Número 1 de EE.UU. se desplomaba un 18.5% a 91 centavos de dólar. Poco antes, llegó a bajar a 87 centavos, nivel inferior a su mínimo histórico de cierre de 98 centavos, registrado hace setenta y seis años.
Se espera que los tenedores de acciones comunes de GM pierdan toda su inversión con la reorganización propuesta bajo las leyes de bancarrota, que podría ser solicitada el lunes.
GM, que forma parte del Promedio Industrial Dow Jones, descendió por primera vez por debajo de u$s 1 durante la mañana, tras haber tocado fondo este año en un dólar.
Mostrar más
Close
Close